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Morelia, Michoacán.- En las últimas horas, cuatro Centros de Readaptación Social de Michoacán cerraron sus puertas luego de que se considerara, no contaban con los requisitos mínimos para cumplir su función; la población penitenciaria que habitaba esos espacios fueron reubicados en otros penales.
Se trata de los Ceresos de Ario de Rosales, Jiquilpan, Pátzcuaro y Zinapécuaro, mismos que presentaban deficiencias, principalmente, en las construcciones y donde además se habían observado precariedades en el servicio que prestaban.
Los 86 reos que abandonaron los penales cerrados fueron trasladados a las penitenciarias de Uruapan, Tacámbaro, Maravatío y Sahuayo, sin registro de alguna incidencia durante el trayecto.