El 12 de septiembre del 2013, María de la Luz Salcedo Palacios, a quien también llaman Lucero, denunció ante el Ministerio Público del estado de Guanajuato que fue golpeada por un conocido, el taxista Miguel Ángel Jasso Manríquez, al negarse a tener relaciones sexuales con él.
Lucero declaró después que la intención del agresor al recibir la negativa no era violarla, era matarla. La golpiza que le propinaron incluyó que le azotaran la cabeza contra el piso y golpes en todo el cuerpo, y pese a esto, María de la Luz pudo escapar de su agresor.
Después de hacer la denuncia en la instancia legal correspondiente, subió fotografías de su rostro y cuerpo golpeados a las redes sociales. La reacción en internet no se hizo esperar, las imágenes mostraban salvajismo premeditado de parte del atacante. La gente replicó las imágenes y expresó su apoyo. La propia María de la Luz dijo que esto no lo hacía para denunciar su caso, “lo hacía para denunciar la misoginia que existe en Guanajuato y la sociedad de la que somos víctimas todas las mujeres a diario”.
Seis meses después, y tras señalamientos durante el primer juicio en el que se le catalogó como una mujer “inmoral”; el agresor fue condenado delitos “menores” como lesiones leves y abusos erótico-sexuales.
Este hecho tiene un nuevo rumbo, ya que la justicia federal amparó a Lucero y ordenó al sistema de justicia de Guanajuato que hiciera la reclasificación de los delitos, por lo que ahora Miguel Ángel Jasso será perseguido por secuestro y tentativa de violación, los que son considerados delitos graves.
A partir de la presión que ejercieron los padres de Lucero y las organizaciones que defendieron a la chica agredida, dio como resultado el cese a algunas personas de la Procuraduría del estado que estuvieron involucrados en el proceso. La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) atrajo el caso de Lucero para emitir recomendaciones al respecto; el Gobernador de Guanajuato, Miguel Márquez Márquez, declaró Alerta Naranja en el estado por el tema de violencia contra las mujeres y se propuso un proyecto de ley en donde se condenaran con 70 años de cárcel para feminicidas.
A través de un comunicado, los padres de lucero agradecieron el apoyo que recibieron, destacando que “Lucero supo que no estaba sola, se le dio la fortaleza para soportar tantas injusticias y luchar contra ellas, y eso es algo para lo que no tengo las suficientes palabras de agradecimiento”.