Vladimir Ríos / @Vladimir3_0
Ante gritos intermitentes de “¡Obrador! ¡Obrador!” y aplausos, con su característico sentido del humor, Paco Ignacio Taibo expuso: “Cuando lo leí [Neoporfirismo. Hoy como ayer, el más reciente libro de Andrés Manuel López Obrador], esperaba la descripción del porfirismo para después compararlo con el peñanietismo de hoy, y sí, efectivamente eso existe en los dos últimos capítulos, que son demoledores al respecto, pero en realidad encontré la historia del porfirismo, ¡Te volviste historiador!”, exclamó Taibo II a Andrés Manuel en la primera intervención.
Entre personas de la tercera edad y curiosos jóvenes que se acercaban a ver si de verdad el dos veces candidato a la presidencia se encontraba presentando un libro en la explanada delegacional y ante una lluvia amenazante, que no pasó de un aire agresivo y frío, se llevaba a cabo el diálogo entre el autor y el presentador.
Para Taibo II, la descripción del porfirismo que hace el autor, deja muy clara la cultura de un régimen dictatorial: “control de la prensa, represión autoritarismo, dictadura vertical, pirámide de poder, gobernadores nombrados desde arriba, concesiones a las compañías extranjeras…” que deja al lector darse cuenta cómo estos esquemas se repiten en el régimen actual.
En este sentido, Taibo II señaló que una de las virtudes del libro es que no hace una burda comparación entre el porfirismo y el actual régimen, si no que a partir de la descripción histórica, deja que el lector saque sus propias conclusiones al respecto.
Al momento de tomar la palabra López Obrador agradeció la invitación y aclaró: “este no es un acto político, es la presentación de un libro”. Mencionó que anteriormente ya había presentado su libro en el Teatro de la ciudad, con la presencia del historiador Lorenzo Meyer y la escritora Elena Poniatowska, “la mejor escritora de México”, mencionó.
Además de agradecer la invitación de Taibo II para presentar su libro, López Obrador aclaró que “campechanea” sus actividades: “busco mezclar y equilibrar mi trabajo como activista, como promotor de la democracia y al mismo tiempo, también como historiador, investigador, como gente preocupada por el estudio y el análisis de la historia y de la realidad”.
Ante las aproximadamente 500 personas que se dieron cita para escucharlo, se podía ver a un López Obrador recuperado de sus recientes problemas de salud y reincorporado a sus actividades en los estados. Al respecto mencionó que venía de una gira por 12 municipios de Chiapas y que se preparaba para una gira de trabajo en Morelos.
Para López Obrador una de las motivaciones más importantes para escribir este libro, reside en la necesidad del hombre de conocer la historia para no repetirla. “No se puede saber hacia dónde se va, si uno no sabe de dónde viene” aun más cuando “se quiere transformar y llevar a cabo un cambio”.
Para el autor esta lucha por la transformación de la sociedad inicia en la Independencia con Hidalgo y Morelos que lograron no solo la independencia después de 300 años, sino que iniciaron la lucha por la justicia en México y la lucha por abolir la esclavitud.
En este sentido, López Obrador citó el famoso texto de Morelos Los sentimientos de la Nación: “que se modere la indigencia y la opulencia, que se eleve el salario del peón, que se eduque al hijo del campesino igual que al hijo del más rico hacendado…”
Luego, existió otro momento estelar en la lucha por la justicia en México que fue la Reforma con los liberales y con Benito Juárez a la cabeza, en el que se luchó por un estado laico, libre de la intervención de la Iglesia.
Finalmente el tercer gran momento de la lucha por la justicia en el país, según López Obrador, fue la Revolución Mexicana. Es en este momento de la historia de México, donde inicia el estudio que realizó el autor.
El gobierno de Porfirio Díaz estableció un régimen dictatorial, en el que entregaron bienes de la nación a particulares nacionales y sobre todo extranjeros, y desde entonces, se entregó la propiedad a unos cuantos terratenientes. En este sentido, López Obrador mencionó el ejemplo de un Terrazas: “se calcula que Terrazas en Chihuahua llegó a tener más de dos millones de hectáreas en 6 haciendas, por lo que se decía que Terrazas no era de Chihuahua, sino que Chihuahua era de Terrazas.”
A partir del régimen de Porfirio Díaz se comienza con el acaparamiento de la tierra y del agua, se comienzan a dar concesiones para la explotación del oro y del cobre, además del petróleo. Para López Obrador esa política de concesiones partía del supuesto de que al conceder los recursos naturales, eso iba a ayudar a la gente: “como si l riqueza fuese contagiosa” exclamó.
Para finalizar este recuento histórico, López Obrador afirmó que todas estas condiciones de explotación que se dieron durante el porfirismo dieron paso a la Revolución.
Para AMLO el modelo porfirista es el mismo que se quiere aplicar actualmente y que viene implementándose desde 1985 en México con la política neoliberal, que “no es más que una copia del porfiriato.” Para el autor esta comparación le dio el título a la obra.
Ante un público atento a sus reflexiones, el autor se cuestiona: ¿Qué podemos esperar de un modelo así? “Está comprobado que nada bueno” expresó, “y resulta que este modelo es el que se quiere aplicar”. Explicó que este proyecto de nación, que se basa en las reformas neoliberales, beneficia a un grupo muy pequeño de personas en detrimento de la mayoría de la población.
“No fue en vano el sacrificio de un millón de mexicanos que perdieron la vida en la Revolución” exclamó, con respecto a las recientes reformas que pretenden llevar a México a ese régimen de opresión y crisis económica.
Con respecto a la precarización del trabajo, López Obrador mencionó que durante la Revolución se mejoró la situación con respecto al porfirismo. A partir de la Revolución se logran diferentes derechos laborales, desde la jornada laboral de ocho horas, hasta la seguridad social y el derecho a los sindicatos.
Según el autor, a partir de la Revolución hubo varios avances en políticas sociales, sin embargo no se avanzó en el ámbito de la democracia. “Porfirio Díaz llegó con el lema de la no reelección, con la idea de que nadie se perpetuara en el poder, pero llegó y se quedó 34 años; después con Madero y su lema de No Reelección, podemos decir que es el único presidente con el cual ha habido democracia en México”.
En ese sentido, López Obrador realizó una comparación entre el presidencialismo de Madero y lo que hay hoy en día: “Madero les escribía a los gobernadores y les decía: cuiden que se respetara el voto, no importa quien gane, porque se debe respetar la voluntad del pueblo y permitan que los candidatos compitan en igualdad de circunstancias” al respecto cuestionó “¿Se imaginan a este presidente (Enrique Peña Nieto) llamándoles los gobernadores para pedir que se respete el voto?”, comentario que provocó un abucheo y risas entre los asistentes.
Finalmente agradeció de nuevo la invitación y expresó su intención de seguir luchando por la democracia en México e hizo una invitación a los asistentes a apoyar la recolección de firmas para conseguir que la consulta popular sea introducida en las siguientes elecciones de 2015, para que se consulte a la población mexicana su opinión sobre la reforma energética.
El pasado miércoles en la tarde, ante un forro lleno, el presidente del Consejo Nacional de morena, Andrés Manuel López Obrador, presentó su libro Neoporfirismo. Hoy como ayer en la Feria Internacional del Libro de la delegación Azcapotzalco.
En punto de las 7 de la tarde, López Obrador llegó a la FIL Azcapotzalco, con una pequeña comitiva que lo acompañaba. Al subir al escenario fue recibido por el por el jefe delegacional de Azcapotzalco, Sergio Palacios Trejo y por el escritor y activista Paco Ignacio Taibo II y quien hizo la presentación del líder de Morena.