Morelia, Michoacán.-El Colectivo de Estudios Críticos del Derecho y las Humanidades emitió un pronunciamiento por los ataques ejercidos en contra de la comunidad de Arantepacua en donde muestra su preocupación por el giro que está dando el gobierno estatal contra los pueblos indígenas.
A continuación su pronunciamiento:
Pronunciamiento en apoyo a la comunidad purépecha de Arantepakua, Nahuatzen, Michoacán
El día de ayer 5 de abril, ocurrió un reprobable acto de represión a la población indígena de Arantepakua, perteneciente al municipio de Nahuatzen, Michoacán, el cual tuvo como resultado el asesinato de varias personas y que otras tantas fueron heridas.
Este suceso se suma a una serie de acciones emprendidas en las últimas semanas por parte del ejecutivo del gobierno estatal, Silvano Aureoles Conejo, que dejan ver un recrudecimiento de la política del gobierno del estado hacia los pueblos y comunidades indígenas de este estado.
Recordemos que hace más de un mes, acudieron más de mil policías a la comunidad indígena de Calzontzin, perteneciente al municipio de Uruapan para amedrentar a la población que se encontraba en resistencia por la inacción del gobierno estatal frente a un problema de la comunidad. De este lamentable hecho, resultaron varios heridos y la captura de 17 habitantes, algunos de los cuales permanecen aún en prisión.
Asimismo, la declaración realizada por Silvano Aureoles Conejo respecto a que la Corte resuelve cosas sin tener elementos suficientes” refiriéndose a los derechos que la comuniad indígena de Cherán, deja en evidencia la postura que tiene dicho mandatario respecto a las comunidades indígenas, además que denota absoluta ignorancia respecto a los procesos que han llevado a que los derechos de la comunidad sean reconocidos legalmente.
Todo esto se suma a la reciente desaparición de la Secretaría de Pueblos Indígenas en el estado de Michoacán, lo cual deja claro que las comunidades y pueblos indígenas de Michoacán no son contemplados como actores relevantes para esta administración. El cúmulo de acciones muestra una grave política que además criminaliza y menosprecia las luchas de los pueblos y comunidades de Michoacán, negándoles su lugar, su relevancia y sus aportaciones en la construcción de una ciudadanía y un proyecto político democrático para el cual son necesarios.
Por todo lo anterior, expresamos nuestra preocupación por el giro que está dando el gobierno estatal contra los pueblos y comunidades indígenas y exigimos que se respeten los derechos colectivos de las comunidades. Nos pronunciamos en contra de cualquier acto de represión y de criminalización de la protesta social contra la población indígena de Arantepakua y reclamamos justicia pronta para las comuneras y comuneros y esclarecimiento de lo ocurrido el día de ayer.