Patricia Monreal / @Michoacan3_0
Morelia, Michoacán.-Finalmente los diputados darán marcha atrás a la intención de cobrar impuestos a partir de 2017 a las prestaciones que los patrones otorguen como estímulos a los trabajadores michoacanos.
El asunto estaba acordado por la noche de ayer jueves y se preveía saldría con el respaldo mayoritario de perredistas y panistas, y la oposición del PRI, sin embargo, en el transcurso de los trabajos de dictaminación durante la madrugada de este viernes se determinó suprimirlo por representar un mecanismo que desincentivaría la entrega de estímulos a trabajadores por puntualidad, asistencia y para la alimentación y hospedaje.
Cabe apuntar que originalmente la propuesta del Ejecutivo preveía cobrar el impuesto del dos por ciento, sobre el monto total de las erogaciones realizadas por conceptos de remuneraciones al trabajo personal subordinado, cuando los patrones otorgaran apoyos a sus trabajadores para alimentación y habitación superiores a los 440 pesos, así como despensas o vales por más de mil cien pesos, o estímulos por asistencia y puntualidad por más de 222 pesos.
Por la noche en entrevistas perredistas y panistas negaban la existencia de tal gravamen asegurando que sólo se homologaría el concepto “trabajo personal” a “trabajo personal subordinado”, conforme lo establece la norma federal así como eliminar como medida el salario mínimo para sustituirlo por la Unidad de Medina y Actualización (UMA), esto pese a que la propuesta sí incluía en su redacción los rubros que serían susceptibles a cobro.
Tras los jaloneos en la dictaminación, el dictamen fue sometido a modificaciones suprimiendo los cobros a patrones por los estímulos entregados a los trabajadores.
