Morelia, Michoacán. Con humedad y condiciones de descuido se observa la obra del Teatro Matamoros de Morelia pese a que el gobierno estatal anunció que para septiembre próximo los trabajos habrían finiquitado.
Este viernes personal de la Auditoría Superior de Michoacán realizó una inspección en el lugar que ha trascendido administraciones estatales sin que, ninguna de estas logre concluir la obra.
En julio pasado el titular de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP) informó que la obra se concluiría para septiembre próximo, y lo único que restaría sería el equipamiento del inmueble y los recursos para ello.
Sin embargo en el recorrido realizado por el personal de la Auditoría, aún se puede observar la obra con signos de abandono, con un puñado de trabajadores realizando algunas actividades.
Cabe apuntar que para finales de 2015 –cuando arrancó la administración silvanista- eran 41 obras por un monto de 225.8 millones de pesos las que habían sido contratadas para la edificación del Teatro Matamoros durante las pasadas administraciones sin planeación y programación previa, o siquiera una calendarización de los trabajos, mucho menos hubo definición de objetivos.
Para entonces el costo de la obra ya había tenido un incremento del 209 por ciento respecto a su valor original.
Información de la Auditoría Superior de Michoacán a propósito de la situación que priva con esa obra –que se pretendía inaugurar inicialmente en 2010- muestra parte de las múltiples irregularidades registradas en torno a ésta.
La obra sólo ha venido absorbiendo recursos sin que logre concluirse. En 2016 el gobernador Silvano Areoles anunció que a principios de 2017 la obra se concluiría con una nueva inversión de recursos por el orden de cien millones de pesos.
La promesa una vez más fue ficción, y en julio pasado fue el titular de la SCOP, José Juan Domínguez López el que dijo que para septiembre próximo quedará lista la obra, y sólo estará pendiente el equipamiento para el que se requerirían otros 90 millones de pesos.
En agosto de 2016 el titular de la Auditoría Superior de Michoacán, José Luis López Salgado reportó que Cuauhtémoc Cárdenas Batel tenía que responder ante el órgano de fiscalización por 158 millones de pesos, ya que era el monto no comprobado ante las autoridades de los recursos presuntamente ejercidos en la construcción del Teatro Matamoros tan sólo en 2011, cuando él presidía el Fideicomiso creado para la realización de la obra.