Con un claro desinterés de los diputados para escuchar sus planteamientos, este martes comparecieron ante las comisiones unidas de Justicia y Gobernación las 12 aspirantes a ocupar la magistratura de la Segunda Sala Ordinaria del Tribunal de Justicia Administrativa del Estado (TJAMICH).
Con un sinnúmero de fallas técnicas que impidieron escuchar fluidamente los planteamientos de algunas de las aspirantes, sólo dos diputados estuvieron de manera permanente en las comparecencias, Antonio Salas Valencia y Cristina Portillo Ayala, ambos presidentes de las comisiones.
Del resto hicieron acto de presencia de manera intermitente, Ernesto Núñez y Fermín Bernabé, así como Araceli Saucedo, quien sólo prendió su cámara cuando Salas Valencia pidió a los diputados que lo hicieran para que la prensa pudiera atestiguar que ahí estaban.
Carmen Eréndira Castellanos Pallares, Ana Luz Mila Barrera, Lizett Puebla Solórzano, Irma Ramírez Curz, María Cristina Iniestra Álvarez, Laura Rosa Torres Paz, Araceli Pineda Salazar, María de Jesús García Ramírez, Sandra Luz Hernández Guzmán, Felipa Valdovinos Marcelino, Vanessa Galicia Gutiérrez, y Susana Nidia Guillén Chávez fueron las comparecientes.
No faltó quien evidenciara carecer de conocimiento en la materia, como el caso de la exconsejera electoral Irma Ramírez Cruz quien gran parte de su comparecencia se enfocó en hablar sobre el trabajo en los procesos consultivos en comunidades indígenas en que participó dentro del Instituto Electoral de Michoacán.
Incluso hubo jalón de orejas a los diputados por parte de una de las aspirantes, Susana Nidia Guillén Chávez quien les recordó su responsabilidad para elegir el perfil idóneo al cargo y que el nombramiento “no surja de compromisos políticos por una negociación y mucho menos en pago de favores”.
Consideró que no todos los currículos de las participantes son los idóneos para el cargo, aunque puedan tener experiencia en otras áreas.
