Rafael Caro Quintero, uno de los narcotraficantes más notorios de México y fundador del Cártel de Guadalajara, compareció este martes ante el juez Frederic Block en la corte federal de Brooklyn, Nueva York. Este evento marca un hito importante en su proceso judicial, ya que el juzgador otorgó un plazo de 90 días a los fiscales estadounidenses para decidir si solicitarán la pena de muerte en su contra.
El plazo, que finaliza el 25 de junio, es clave para la evolución del juicio, pues Caro Quintero enfrenta cargos graves, que incluyen tráfico de drogas, crimen organizado y el asesinato en 1985 del agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena. La decisión sobre la pena de muerte, de ser solicitada, se tomará en este periodo crítico.
Además, durante la audiencia, el tribunal determinó que el narcotraficante recibirá una nueva abogada, especializada en casos complejos, ante la posibilidad de que se le imponga una sentencia tan severa como la pena capital.
En la sala también estuvo presente Ismael Quintero Arellanes, sobrino de Caro Quintero, quien enfrenta cargos similares y cuyo proceso judicial ha avanzado significativamente tras su extradición a Estados Unidos en 2023.
Ambos acusados deberán regresar a la corte el 25 de junio, fecha en la que se determinarán los próximos pasos del proceso judicial. Este es un desarrollo crucial en el caso de uno de los criminales más buscados por las autoridades estadounidenses y en el que se espera una larga batalla legal.
