La iglesia San Cosme y San Damián, ubicada en un céntrico barrio de la capital mexicana, decidió retomar la tradición católica de cubrir durante la Cuaresma todas las imágenes y esculturas religiosas con mantas moradas, haciéndolo este año solo con las figuras femeninas.
La virgen María y las santas de una parroquia de la Ciudad de México, fueron cubiertas con mantas moradas con la intención de llamar la atención sobre la violencia de genero que se vive en el país, aunque un representante de la Iglesia católica aclaró que no apoya la demanda del derecho al aborto.
«Se cubren para que nuestra atención se centre en lo que está sucediendo con la mujer en México, dijo a la AFP, José de Jesús Aguilar Valdez, subdirector de radio y televisión del Arzobispado de México».
El sacerdote aclaró sin embargo que está expresión no tiene ninguna filiación política.
Dentro de la Iglesia «hay machismo, hay discriminación hacia las mujeres, dentro de la Iglesia hay omisiones hacia la mujer y dentro de la Iglesia hay una educación que no siempre permite que las mujeres puedan enfrentar este problema», señaló.
