Imagen de archivo
Morelia, Michoacán.-La inoperancia de 23 de las 33 plantas tratadoras de aguas residuales ubicadas en los municipios aledaños al Lago de Cuitzeo, ha ocasionado severos daños a la salud de la población que habita en las comunidades ribereñas, debido a que el 40 por ciento de las aguas negras que se vierten al embalse no son sometidas a ningún tratamiento
En entrevista, Juan Camacho Orozco, gerente Operativo de la Comisión de la Cuenca de Cuitzeo, apuntó que en conjunto los municipios ribereños cuentan con 33 plantas tratadoras de agua, de las cuales 14 se encuentran en Tarímbaro, dos en Morelia y 17 en los municipios aledaños al lago.
Sin embargo, puntualizó que de las 17 plantas, solo trabaja el 50 por ciento y que todas las plantas localizadas en el municipio de Tarímbaro son inoperantes, en mayor medida porque las empresas constructoras responsables del desarrollo inmobiliario, entregaron a la administración municipal instalaciones de tratamiento ineficientes.
En este sentido, Camacho Orozco apuntó: “el municipio de mayor resistencia en el tratamiento de aguas residuales es Tarímbaro por injerencias de los fraccionadores. Cuando [construyes] un fraccionamiento la ley te exige que pongas un sistema de tratamiento, de lo que se hacen cargo los mismos fraccionadores”.
“Una vez que se entrega el fraccionamiento, se hace responsable al organismo operador del Ayuntamiento de esas plantas. Pero desafortunadamente en Tarímbaro se entregaron instalaciones que no cumplían los requerimientos e implicaban gastos de operación excesivos, que los ayuntamientos tienen que absorber por una mala planeación de los fraccionadores”.
No obstante de las claras violaciones a la normativa oficial, el gerente Operativo de la Comisión de la Cuenca de Cuitzeo, resaltó que es improcedente cualquier denuncia formal contra las empresas constructoras, pues una acción como esa se debe de darse justo cuando los fraccionadores entregan el control de las plantas al Ayuntamiento, por lo que no descarta que exista negligencia por parte de las pasadas administraciones municipales.
“Los responsables directos son los ayuntamientos, ellos son los que tienen a cargo esas plantas, estén o no operando. Aunque ahora, ya no podría interponer acciones legales contra los fraccionadores, porque estos cumplen cuando entregan la planta y con ello se deslindan de cualquier responsabilidad. Cuando el Ayuntamiento recibe las plantas las tienen que recibir con manuales y funcionando. En su momento el Ayuntamiento fue negligente” apuntó.
Finalmente, dijo que se estima que de los 2 mil 700 litros de aguas negras por segundo que se descargan en la cuenca, solo son tratados el 60 por ciento, siendo la capital michoacana la que realiza el 80 por ciento del saneamiento por medio de sus dos plantas ubicadas en los Itzicuaros y Atapaneo, las cuales tratan 1 mil 200 y 200 litros por segundo, respectivamente.
Los daños a las comunidades
Por su parte, José Francisco Javier Chávez Ojeda, productor perteneciente a la demarcación de Álvaro Obregón-Tarímbaro, señaló que los principales problemas generados por las aguas negras que se vierten en el Lago de Cuitzeo son los ocasionados a la salud de la población, así como, a la agricultura.
“Se han presentado daños a la salud, cuando andas regando la parcela, metes la mano a la tierra y automáticamente se agrieta, hay personas que se han enfermado de la piel por la contaminación del agua”, apuntó Chávez Ojeda.
Además agregó que la problemática en la agricultura en la región son las aguas negras provenientes de Cepamisa, de Morelia, Ciudad Industrial, así como la que se desechan de los fraccionamientos de Tarímbaro.
Chávez Ojeda, indicó que solo en su población, son más de 8 mil 803 hectáreas las afectadas, y que pese a ello, no existe ningún apoyo de los ayuntamientos en la limpieza del lago.
“Tenemos cuatro años en el módulo insistiendo que se trate el agua, no hemos quitado el dedo de la llaga, pero los ayuntamientos no nos apoyan, el lirio acuático crece con el agua contaminada, porque es un fertilizante para la planta, aunque lo extraemos con recursos de los agricultores, sin que los ayuntamientos de Álvaro y de Tarímbaro aporten para la limpieza de los canales” comenta.
