Al menos 170 personas han fallecido en Nepal tras las fuertes lluvias que han causado severas inundaciones en la capital, Katmandú, y en otras partes del país. Grandes áreas del este y centro de Nepal han quedado sumergidas, afectando barrios enteros en Katmandú.
El desbordamiento de los ríos ha generado una grave situación con un aumento constante en la cifra de víctimas.
El Ministerio del Interior informó que el balance actual es de 170 fallecidos y 42 personas desaparecidas. Entre los afectados se encuentra un hombre de 40 años, quien tuvo que evacuar con su familia en la madrugada del sábado cuando el agua inundó su hogar.
Los monzones, que ocurren entre junio y septiembre, causan estragos anualmente en el sureste asiático, pero en los últimos años se ha visto un aumento en la frecuencia y gravedad de las inundaciones y deslaves.
Los expertos atribuyen este incremento al cambio climático, que ha exacerbado estos fenómenos naturales.