(22 de febrero, 2014).- De acuerdo con un análisis elaborado por la historiadora Cristina Masferrer, los libros de cuarto de primaria, incluyendo algunos libros oficiales de la Secretaría de Educación Pública (SEP), contienen mensajes racistas, imprecisiones de índole historiográfica y además fomentan el “negacionismo” acerca del origen afroamericano en México.
En la presentación de su libro Mulques, negritas y mulatillos, editado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), así como por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Masferrer enfatizó el papel que la cultura negra ha tenido para el desarrollo de nuestro país, mismo que se le ha negado en la historia.
“He analizado los libros de texto de la primaria y también los de telesecundaria; lo que me di cuenta a partir de esta investigación es que, si bien hay información de estas comunidades en los libros de geografía e historia, también hay errores escandalosos”, afirmó.
En el libro de historia de cuarto grado de primaria, se dice que en 1553 se prohibió la entrada de más africanos y “esto es absolutamente falso, el libro de historia que presento, es sobre el siglo XVII y entonces seguía habiendo tráfico de esclavos”.
Otro de estos “errores”, añadió la académica, es que se sigue presentando la noción de “raza”, la cual, en términos biológicos “se ha comprobado que no existe”.
“Se habla, por poner un ejemplo, de razas y en específico de la raza negra; yo llegué a notar que en un libro de texto, se llegó a poner una ilustración de personas afroamericanas, al lado de unos monos comiendo a un mamut”, sostuvo.
Debido a esto señaló que en la educación mexicana hay huecos con respecto al combate contra la “cultura de la discriminación”.
“En México, y en específico en el Distrito Federal, solemos pensar que aquí no hay negros o que no somos descendientes de africanos, pero no es así. Mi estudio trata de explicar que las comunidades negras o afroamericanas son, de hecho, uno de los tantos orígenes de los mexicanos; gran parte de nosotros seguimos presentando rasgos o aspectos culturales y físicos de ellos”.
‒¿Por qué crees que exista esta negativa a explorar el origen negro de los mexicanos?
‒Primero por el racismo que hay y la discriminación, para mucha gente es muy fácil decir que no discriminan o que no sienten ningún prejuicio, pero les es muy difícil reconocerse como descendientes de afroamericanos y más aún, mucha gente quisiera ser más blanca. Pero más allá del racismo y la discriminación, pesa mucho la ignorancia sobre estos estudios.
A través del análisis minucioso de diversas fuentes documentales, Cristina Masferrer ofrece un estudio de la condición de los niños esclavos afroamericanos en el siglo XVII.
Además de registrar, desde un ángulo revelador, los contornos concretos de la esclavitud infantil, el volumen analiza las relaciones familiares y las redes sociales que se establecieron entre africanos y afrodescendientes, y contribuye a saldar una vieja deuda sobre el aporte de esta población en la construcción económica y cultural de nuestro país, el cual se había dejado de lado en la historiografía convencional, según expuso la autora.
