Con persignarse cada mañana, “que ni sé hacerlo muy bien”, Cristóbal Arias Solís se encomienda cada día por su seguridad, según lo afirmó el aspirante al Senado por la coalición Juntos Haremos Historia, al ser cuestionado respecto a si el atentado la semana anterior en contra de un aspirante en Apaseo El Alto, Guanajuato, no prende focos de alerta en Michoacán para los candidatos de esta fuerza política.
Luego que hiciera comentarios sobre los niveles de inseguridad que, dijo, ha captado en sus recorridos por el interior del estado, Arias Solís señaló que no ha hecho ningún planteamiento formal para demandar seguridad en sus actividades proselitistas, aunque lo deseable, señaló, “es que no pase nada, ni a mí ni a nadie y de ningún partido político”.
Confió en que mucha gente hasta “me echa la bendición”, al igual que le cuestiona sobre cómo le hace en sus recorridos por la entidad para sentirse seguro. “Yo no soy muy creyente que digamos, pero últimamente miro hacia el cielo, hace un montón de años que no lo hacía, ahora hasta me persigno, que no lo sé hacer muy bien”, al igual que, un tanto jocoso, señaló que hay nerviosismo de su parte porque “vamos con el Jesús en la boca, no nos queda de otra, la verdad es que todos, andamos al filo de la navaja en Michoacán”.
Ante los atentados contra candidatos del Movimiento de Regeneración Nacional en el país, dijo, “yo espero llegar vivito y coleando a la Cámara de Senadores”, al igual que afirmó que “no espero nada del gobierno” en cuanto a que se generen condiciones de mayor seguridad en el desarrollo de las campañas.
De las zonas con mayor riesgo, ubicó a la Tierra Caliente colindante con Guerrero, donde dijo, ya vivió un incidente en días pasado en la comunidad de Rivapalacio, al encontrarse en medio de un presunto operativo de policías federales y del estado atrás de objetivos delincuenciales, donde finalmente fue escoltada su comitiva por parte de las corporaciones policiacas hasta salir de la zona.
