Durante 17 años, el biólogo y conservacionista Juan Felipe Charre Medellín ha estudiado la Reserva de la Biósfera de la Sierra Gorda en Guanajuato. A través de su trabajo, ha realizado hallazgos cruciales sobre la biodiversidad de la región. Uno de los más destacados es el reciente avistamiento de un jaguar (Panthera onca) en territorio guanajuatense.
Según Charre, este descubrimiento tiene una gran relevancia para la conservación: “La importancia de registrar jaguares en Guanajuato radica en que se amplía el conocimiento sobre los territorios que ocupan a nivel nacional, sobre todo en lugares donde no se consideraba su presencia, como en este estado”.
Este hallazgo no solo confirma la presencia de los seis felinos que habitan en México, sino que también representa un hito en los esfuerzos de conservación a nivel nacional y continental, reafirmando la importancia del jaguar como símbolo cultural y ecológico en el país.
Un proyecto clave para la conservación
El registro del jaguar en Guanajuato es resultado del proyecto de Conservación y Monitoreo de Felinos Silvestres en Rancho La Onza, liderado por la organización Conservación del Patrimonio Natural para el Bienestar Social (COPANABIS A.C.) bajo la dirección del Dr. Juan Felipe Charre Medellín. Este esfuerzo cuenta con la colaboración de Toyota México, cuyo presidente, Luis Lozano, subrayó: “Para nosotros, la protección del medio ambiente y la colaboración con gobierno, academia y comunidad son clave para alcanzar las metas de nuestro Reto Medioambiental 2050”.
El jaguar, un viajero incansable
Charre explicó que el jaguar avistado pudo haber llegado a Guanajuato desde estados vecinos en busca de recursos y presas. “Esto demuestra la gran capacidad de dispersión de la especie hacia nuevos territorios. No significa que el jaguar no haya estado antes en Guanajuato, sino que no se había podido registrar pese a más de 17 años de trabajo en la Sierra Gorda”, señaló.
Es posible que el ejemplar provenga de poblaciones documentadas en Querétaro, San Luis Potosí o Tamaulipas, evidenciando la conectividad de los ecosistemas en la región del Golfo de México.
Ecosistemas en recuperación
Aunque no se puede confirmar aún una población estable de jaguares en Guanajuato, su presencia indica condiciones óptimas en el ecosistema, como la abundancia de presas. Charre destacó el aumento en las poblaciones de especies como el venado cola blanca, el coatí y el pecarí de collar, un reflejo del trabajo de conservación realizado en Rancho La Onza.
“El jaguar es una especie indicadora de la calidad de los ecosistemas. Su registro en Guanajuato confirma que la Sierra Gorda, que alberga el 70% de la biodiversidad del estado, es una de las regiones mejor conservadas”, concluyó Charre.
Este hallazgo no solo resalta el valor de los esfuerzos de conservación, sino también la importancia de proteger los hábitats naturales como parte del desarrollo sostenible en México.