No solo por motivos sentimentales se puede poner fin a una relación, las sexuales también son cruciales.
Con frecuencia escucho a hombres y mujeres quejarse de su vida sexual, de que es predecible, aburrida, poco interesante, o por el contrario, que la pareja solo quiere sexo y nada de romance.
El sexo definitivamente tiene un rol importante en la vida de cualquier pareja, ya sea porque escasea, porque abunda o porque viene en formas poco tradicionales. O simplemente porque es fantástico y mantiene a la pareja unida y atraída y de ¡muy buen humor!
Es cierto que con el paso del tiempo, esa primera atracción física que se siente y ese deseo constante de estar uno “encima” del otro, se va pasando y da lugar a un romance más calmado, menos físico y menos pegajoso.
Después de esta fase mágica y pasional pueden sucederse muchas cosas, pero algunas de ellas significan el fin de la relación, porque uno de los dos no está feliz o está inconforme con la vida sexual de la pareja.
Estas son cinco razones por las que novios, amantes y matrimonios deciden ponerle fin a una relación:
Poco sexo
Muchos acusan al matrimonio de acabar con la vida sexual de la pareja: los niños, el trabajo y el estrés sin duda nos quitan energía y en algunos casos el deseo sexual simplemente se desvanece. Pero no sólo ocurre en parejas casadas. Muchas personas que sufren depresión, ansiedad, son obsesivas con su trabajo o simplemente no tienen ganas de tener sexo también atraviesan esta fase de “escasez sexual”. Y en muchos casos el otro, el que sí quiere tener sexo, decide terminar con la relación por falta de contacto físico.
Puro sexo
En el otro extremo se encuentran las parejas en las que uno de los dos solo quiere tener sexo. Nada de cenas románticas, cine, paseos por el parque, cocinar juntos: solo sexo. Si bien funciona para algunos, otros en cambio necesitan (además del sexo) romance, conversaciones, afecto y no sentirse que simplemente están juntos para quitarse la ropa y meterse en la cama (o en donde prefieran tener relaciones).
Porno
El consumo de pornografía (en especial por parte del hombre) es la causa de muchos divorcios y rupturas. Si bien algunas chicas están de acuerdo con que su pareja mire porno, hay casos en que más que en un pasatiempo se transforma en una adicción y con ello la relación se encamina en una sola dirección: el fin.
Sexo en público
Una cosa es que fantaseen con la idea, y otra que sea su única forma de excitarse. Hay personas que necesitan estar al límite y sentir que van a ser descubiertos para excitarse. Muchas parejas terminan su relación porque uno de ellos sólo quiere tener relaciones sexuales en lugares públicos, como el parque, la calle o la playa.
Esperar hasta el matrimonio
Esperar hasta casarse para tener sexo es una forma de vida que muchos eligen, en especial por cuestiones religiosas. Pero siempre depende del otro, que esté o no dispuesto a esperar. Hay parejas que simplemente no lo logran y terminan (y por supuesto, nunca llegan a casarse).
¿Has tenido alguna de estas experiencias? ¿Has terminado una relación por problemas sexuales?