En la isla de Mindanao, ubicada en el sur de Filipinas, se registró un terremoto con magnitud de 6.5 sobre la escala de Richter, el cual dejó ocho muertos, dos desaparecidos y 400 heridos.
De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que registra la actividad sísmica en todo el mundo, el epicentro del movimiento se situó a 10 kilómetros de profundidad y a unos 15 kilómetros de la población de Bansalan.
Es el tercer sismo que se registra por encima de magnitud 6 que se produce en la región en menos de dos semanas.
Un total de 25 mil 630 personas se han visto afectadas por el terremoto del martes en todo Mindanao, de las que 12 mil 760 se encuentran refugiadas en alguno de los 19 centros de evacuación disponibles en las zonas afectadas, y que también ha causado cuantiosos daños en escuelas, hospitales y más de 2 mil viviendas.
Filipinas se ubica en el Anillo del Fuego del Pacífico, donde se concentra el 90 por ciento de la actividad sísmica del mundo, así como la volcánica, por lo que se registran alrededor de siete mil temblores cada año.