Los llamados Tendederos del Acoso colocados en diferentes Facultades de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, son la memoria viva de la violencia feminicida que persiste en la Máxima Casa de Estudios del Estado.
Las voces de jóvenes estudiantes registradas en papeles e imágenes que visten muros de las Facultades de Derecho, Arquitectura, Medicina y Odontología principalmente, son evidencia de la situación de acoso de profesores fundamentalmente hacia sus alumnas.
La Universidad Michoacana cuenta con un Protocolo para la Prevención, Actuación y Erradicación de la Violencia de Género, que no ha sido eficaz para contrarrestar los casos de acoso a jóvenes nicolaitas, ni ha inhibido el actuar de profesores que incurren en este tipo de conductas.
En el Congreso del Estado en octubre de 2019, se creó una Comisión Especial para dar seguimiento a los casos de acoso en la Universidad. Hasta el momento los diputados que la integran sólo se han reunido en una ocasión, fue a principios de noviembre para proyectar su plan de trabajo; hasta ahí ha quedado su alcance.
Las jóvenes estudiantes desconfían de acudir a los cauces institucionales para denunciar, tanto que, la Comisión Estatal de Derechos Humanos sólo tiene el registro de una queja por acoso durante 2019, y en este 2020 no se tiene ninguno.
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