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Tenemos miedo pero no vamos a instalar casillas

Rodrigo Caballero/ @RodCaballero

Los Reyes, Michoacán. Saliendo de Cherán se necesita hora y media para llegar a las Comunidades Unidas, el viaje es largo no tanto por la distancia sino por el camino que está plagado de baches, curvas, vacas y montículos de tierra que sirven para no dejar pasar camiones grandes.

La carretera cruza dos pequeñas cordilleras llenas de árboles y dos planicies con sembradíos hasta donde alcanza la vista. Por diversas razones todos los pueblos estaban de fiesta pero el ambiente era gris y amenazante.

La lluvia tocó tierra ya en la tenencia de Cherato, en el municipio de Los Reyes, eran las 5 de la tarde cuando uno de los dirigentes del movimiento comenzó a explicar porque no iban a instalar casillas.

Pecamos de idealistas

Ahora tienen el apoyo del pueblo -en eso de no dejar entrar a los partidos políticos- pero antes no era así. Todavía en las elecciones de 2011 Cherato se dividía entre el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
“Anteriormente aquí en Cherato ya no se conocían por nombres y apellidos sino por priistas y perredistas y se odiaban” dice el Tata como si hablara de hace 100 años.

Hace cuatro años, en el día de las elecciones, ambos grupos colgaron sus banderas en un lado y otro del pueblo. Se cucaban gritándose malas razones como queriéndose pelear.

Pero nada, el municipio se lo llevó el Partido Acción Nacional (PAN) encabezado por el ahora candidato a diputado José Antonio Salas Valencia.

Una administración con escándalos de fraude hasta por un millón de pesos y relacionada por los grupos de autodefensa con el cártel de los Caballeros Templarios.

En un primer momento, las tenencias intentaron solucionar sus problemáticas, el 30 de enero del 2013, con una carta dirigida al presidente municipal pero él nunca respondió.

El documento era un reclamo para que el Ayuntamiento de Los Reyes garantizara la seguridad en el municipio, además le explicaban sobre las extorsiones y las amenazas que recibían a diario.

La carta también funcionó como un ultimátum y tras no recibir contestación el pueblo se levantó. Era 11 de marzo del 2013 cuando cerraron sus entradas y tomaron el control de su pueblo. “Cuando se ocupó nadie quería ser amigo de Cherato” recuerdan sus dirigentes.

El Tata cuenta “Los que eran priistas de hueso colorado y perredistas de hueso colorado cuando requirieron ayuda de los partidos políticos ¿Cuándo vinieron? dijeron ‘chinguen a su madre los partidos’”.

Ahora no los quieren ver, ni siquiera han permitido que los candidatos hablen con la población, ellos tienen mucha labia y creen que dejarlos entrar es provocar la división del movimiento.
“Pecamos de idealistas pero al final de cuentas es lo que va a quedar. Si les seguimos el juego a los políticos, hacemos como que sí les creemos y seguimos en las elecciones nuestros pueblos se dividen”.

Entre Reyna y Silvano

Además de la seguridad quieren acceso a servicios básicos de agua, luz, pavimentación y alcantarillado. “Eso se necesita para ser un pueblo desarrollado, entonces nosotros vivimos en el subdesarrollo” aclaran los comunitarios.

Dicen que en algún momento tuvieron pláticas con el gobernador interino Jesús Reyna García –antes que fuera detenido por narcotráfico- y con el gobernador Fausto Vallejo –en su segundo regreso que sería el último- después no hubo comunicación.

Ni los bloqueos ni las marchas en silencio ayudaron, el único botón que hizo reaccionar a las autoridades fue la amenaza de no instalar casillas.

Han ido para hacer gestiones sobre obras como la clínica, la telesecundaria y la empacadora de aguacate que necesitan pero sólo pláticas nada de acción. “En cada reunión nos dicen ‘ya pongan las casillas’ pero no si son puras palabras” recuerdan los pobladores.

Ahora con las elecciones dicen que los candidatos han buscado apoyo entre las comunidades, entre ellos el perredista Silvano Aureoles Conejo.

“Silvano resultó más bandido que nada nos dijo que apoyaba que nos decía como y nosotros metíamos a su presidente municipal” apuntan los comunitarios.

Aseguran que Aureoles, como lo conocen, les dijo que en Los Reyes hay mucho dinero y se lo iban a repartir “uno para ti, otro para ti y otro para el pueblo dijimos a cabrón pues así es la política verdad”.

No somos autodefensas

Las Comunidades Unidas están conformadas por las tenencias de Cherato, Cheratillo, 18 de Marzo y Oruscato todas pertenecientes al municipio de Los Reyes.

Desde el levantamiento, en la región se han registrado varias desapariciones entre la que está la del encargado del orden de la comunidad de Cherato, Roberto Serano Cervantes, apenas a 11 días después de tomar las armas.

Muchas cosas han pasado desde que cerraron sus accesos, por ejemplo, llegó y se fue el ex comisionado Alfredo Castillo Cervantes, dejando tras de sí a la Fuerza Rural. La policía encargada del “orden y la seguridad” en la región.

En el municipio de Los Reyes, ubicado en el límite de la Sierra y la Tierra Caliente michoacanas, los miembros de la Fuerza Rural se dividen en dos tipos: los conocidos y los otros.

Los primeros son 50 hombres que pertenecen a la comunidad y pasaron los exámenes de confianza pero de “los otros” no se sabe ni de dónde vinieron, éstos últimos levantan mucha sospecha entre los guardias comunitarios.

Creen que ellos se encargan de realizar los “levantones” en el municipio y creen que los tienen en contra por su negativa de aceptar el Proceso Electoral 2015. “Nosotros no somos autodefensas somos comunitarios” aclaran los dirigentes del movimiento como diciendo que tienen otra forma de organización y les falta armamento.

A pesar de ello, las Comunidades Unidas siguen firmes al asegurar que no permitirán las urnas electorales el próximo domingo. “Tenemos miedo de lo que pueda suceder el 7 pero no vamos a instalar casillas” aclararon.

6 junio, 2015
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