El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) anunció que todo está casi listo para dar inicio al Encuentro de Arte “Rebel y Revel”, un evento que reunirá a más de mil artistas de distintas disciplinas y rincones del mundo, del 13 al 20 de abril, en el caracol zapatista Jacinto Canek.
Participarán creadores de comunidades zapatistas y de países como Alemania, Brasil, Francia, Grecia, Palestina, Perú y Sudán. El Capitán Marcos, en su característico estilo, compartió detalles sobre los preparativos y recordó que el registro de participantes ya ha cerrado, aunque adelantó que habrá transmisiones durante los días 13 y 14 de abril.
En su comunicado, Marcos presenta a los músicos de “El Cañón del Sonidero” como los encargados de hacer vibrar el suelo a ritmo de cumbia rebajada, y describe —con buen humor— las áreas ya habilitadas: dormitorios, estacionamiento, lavandería, espacio para lavarse las manos, zonas para grafitis y murales, una maqueta de quirófano comunitario, y el equipo de sonido proporcionado por los sonideros zapatistas de Oventik y Morelia.
También se menciona que jóvenes artistas —y algunos no tan jóvenes— ensayan hasta altas horas de la noche para asegurar que la pista de baile quede bien “apisonada”. Aunque no hay más espacio para nuevos registros, el Capitán ofrece una estrategia alternativa: “digan que fueron abducidos por extraterrestres justo cuando iban a enviar la solicitud”, sugiere con picardía.
Sobre la transmisión en línea, advierte que “es uno de tantos supositorios que pueblan estas montañas”. En cuanto a la seguridad del evento, informa que el “Comando Palomitas” ha reclutado a dos fieras: Gatito y Jerman, formando así el GRRR —Grupo de Reacción Retardada Reiterativa—, cuya única condición para integrarse es ser menor de edad (al menos en el calendario).
El pronóstico del clima prevé días soleados y noches frías, pero nada que una buena bailada no pueda remediar. El código de vestimenta, por supuesto, es libre, siempre que permita moverse al ritmo de la fiesta.
Finalmente, el comunicado cierra con un tono humorístico aludiendo al “juicio” contra el Capitán, declarado culpable por abrumadora mayoría, cuya condena será un mes entero comiendo sopa de calabaza. Entre acusaciones de conspiraciones conservadoras y una encuesta popular que prefiere los tacos a la justicia, el mensaje del EZLN es claro: la lucha también se baila, se pinta, se canta y se ríe.