Fuente: Un Tipo Serio
El mundo detrás de la industria pornográfica está lleno de presunciones y afirmaciones descomunales que no tienen basamento en la vida real. Aquí desmentimos los cinco principales mitos sobre el porno que debes conocer. La verdad nos hará libre (de estar mal informados):
1. “Para ser actor porno debes tener un miembro muy bien dotado”
Aunque cueste creerlo, no todos tienen un pene descomunal, eso lo afirma la española Sandra Uve, directora de películas porno y dibujante de cómics. Así, aunque en todas las películas haya al menos un actor que rompe las proporciones, los otros no muestran algo tan descomunal. “Con 17 centímetros es suficiente”, finaliza Uve. Si esté entre tus metas ser actor porno, ya sabes el requisito mínimo.
2. “Todos los orgasmos son fingidos”
Sí y no. Para Sophie Evans, actriz porno húngara que reside en Barcelona (España), las actrices sí llegan muchas veces al orgasmo, “lo que pasa es que el director ha marcado un punto en el que tienes que tenerlo y, claro, a veces no coincide con el momento en el que te lo estás pasando mejor, que es antes o después”. Evans admite, no obstante, que en la vida real no es tan escandalosa, la ficción sexual exige exagerar todo.
3. “Sólo los hombres consumen porno”
Es hora de romper el tabú: las mujeres sí ven porno, aunque la mayoría niegue hacerlo. Y hablamos de muchísimas mujeres, no de un grupo excepcional. Esto ha sido así con la irrupción del Internet que facilitado las posibilidades del acceso, además que amplió las opciones para las espectadoras: desde lo más soft y romántico hasta lo más “kinky”. Y en esos subgéneros –en ese nicho del mercado, por hablar en términos comerciales- es donde la mayoría de las mujeres ha definido su gusto particular por los videos triple X, afirma Sandra Uve.
4. “Las grabaciones de las películas porno son orgías”
Falso. Tu imaginación te ha llevado detrás de las cámaras, pero es solo tu imaginación. En realidad, se trata de una filmación o grabación tan profesional como cualquier otra (bueno, no como cualquier otra, pero respetando ciertos lineamientos básicos), más cuando se trata de grandes productoras establecidas. Son los actores los que arman orgías, pero como parte de su trabajo.
Sophie Evans comenta que pueden ser muy divertidos los rodajes, pero al fin y al cabo deben seguir las órdenes de un director: “Eres un profesional y no estás ahí sólo para pasártelo bomba. Muchas veces, cuando acabamos de rodar una toma, no seguimos por muy bien que nos lo estemos pasando. Trabajamos a las órdenes de un director y debemos responder a lo que él espera”.
5. Las actrices son promiscuas
¿Tienes la fantasía de salir con una actriz porno y tener sexo ilimitado? Pues, de nuevo, tus fantasías pueden ser exageradas. Evans admite que en una relación estable las cosas no distan mucho de la vida sexual de una pareja promedio. El principal problema para algunas actrices y algunos actores es mantener relaciones largas: “Piensa que es un trabajo duro que requiere viajar bastante. Tengo muchas amigas que tienen problemas por ello, porque mantener una relación trabajando de esto no es nada fácil”. ¿Pero acaso hay mucha diferencia con los actores de Hollywood?