Ciudad de México.- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador ha comenzado a impulsar una reforma a la industria eléctrica del país, mediante la cuál busca privilegiar a la empresa paraestatal, la Comisión Federal de Electricidad sobre las empresas privadas, para así garantizar que el costo de la electricidad pueda disminuir.
Y es que en la iniciativa en poder de la Cámara de Diputados se contempla dar prioridad a la energía eléctrica producida por la CFE a través de plantas hidroeléctricas, las plantas propias de la CFE a base de carbon y otros combustibles y en tercer lugar la energía producida a través de particulares.
Por su parte en dicha iniciativa se elimina las subastas de energía, al considerar que esto lo único que logra es elevar los precios al consumidor final de forma arbitraria y por el contrario establece que los precios no estarán a merced de la especulación.
En caso de aprobarse dicha reforma, los cambios a como funciona el sistema eléctrico en México estarán protegidos durante los próximos 20 años.
“Las subastas son una perversa maquinación ideada con el único propósito de garantizar la rentabilidad de las inversiones de los generadores privados en detrimento de la CFE, ya que los contratos correspondientes tienen una vigencia de 20 años y los precios no están sujetos a variaciones del mercado”.
