Ana María, mamá de la pequeña de cinco meses hallada muerta en Saltillo, confesó haber fingido el secuestro de su hija y dejar el cuerpo de la menor en un terreno baldío, informó el fiscal General del Estado de Coahuila, Gerardo Márquez Guevara.
La mamá confesó el hecho luego de que se obtuvieron imágenes captadas por cámaras de seguridad de un negocio cercano, en el se puede ver cuando una mujer abandona el cadáver.
“Tenemos videos, testimonios que dan cuenta que por lo menos testigos no se percataron de esas condiciones de secuestro y por el contrario tenemos también unos videos en los que se ha determinado que una persona del sexo femenino acude al lugar en donde se encontró el cuerpo de la menor con algo en las manos, seguramente con algo envuelto”, detalló la Fiscalía General de Coahuila.
Ana María reconoció que encontró a la bebé recostada boca abajo y sin respirar, mientras ella lavaba la ropa, por lo que trató de resucitarla. Sin embargo, al no lograrlo entro en pánico, y optó por ir a la tienda a comprar unas toallas húmedas, para posteriormente llevar el cuerpo y dejarlo en el terreno baldío donde fue encontrada.
La Fiscalía estatal añadió que están a la espera de cerrar la investigación para la calificación del delito, a qué corresponde y cómo habrá de judicializarse, lo que podría ser acción por omisión, pero no se ha determinado, además de insistir que existen indicios de que en Coahuila, y en específico Saltillo, opere una banda que se dedica al robo de menores.
Por su parte, el fiscal confirmó que los datos de la necropsia determinaron que la causa muerte fue asfixia por bronco aspiración. Destacó que se detectaron inconsistencias en la versión de la madre que desechaba su versión de secuestro, en donde los tiempos no coincidían con presuntas acciones como la solicitud de auxilio.
“En las testimoniales se desprende que en ningún momento se oyeron gritos, ningún llanto, no había testigos del robo de la bebé, nadie oyó nada, nadie escuchó nada”, agregó.