Un proyecto que sustituya la cancelación de las Zonas Económicas Especiales por parte de la federación, que sea propuesto por el estado y que busque potenciar las economías regionales, debe sustituir una visión en la que habría que “tener cuidado” con magnificar los presuntos efectos negativos para Michoacán, sugirió el analista Heliodoro Gil Corona, del Colegio de Economistas del Estado (CEEM).
Responsable de Proyectos Estratégicos del organismo colegiado, Gil señala que en principio el proyecto de las ZEE no es de la entidad “y mucho menos estratégico”, al destacar que atrás de los lamentos y condenas de los empresarios porque el gobierno federal decidiera cancelarlo, se encuentran visiones particulares y focalizadas en un interés corporativo, no general.
Señaló que en su momento, la creación de las ZEE se impulsó como “una salida ante la creciente precarización laboral y en estados que van en reversa, como es el caso de Michoacán, con un decrecimiento en su economía, es decir, para atenuar su desarrollo. Todo mundo nos colgamos de esta estrategia”, dijo acerca de las expectativas generadas por las ZEE.
La entidad dijo, requiere de un proyecto que impulse la solución a sus necesidades reales, en este caso las regionales en el contexto de la Costa estatal con el Puerto Lázaro Cárdenas, por lo que deben plantearse por parte del gobierno “zonas complementarias al desarrollo”, aunque al igual que las ZEE no deben ser vistas como una “panacea”, sino que deben complementarse con acciones en el campo para su recuperación, y sobre todo dotar de infraestructura necesaria que apoye la producción y comercialización, al carecer de una conectividad regional que eleve su potencialidad y que no atrae a inversionistas.
Sobre la decisión de la federación, de anular el proyecto de las ZEE impulsado por el pasado gobierno de Enrique Peña Nieto, señaló sin embargo que “mal hace al no considerar esta propuesta, que debe prevalecer, pero no cancelarla de un plumazo”.
Si con otra modalidad no se ataca la realidad que enfrenta el estado en materia económica y que requiere de la concurrencia de la federación, dijo, Michoacán se mantendrá en un estimado de 1.3 anual, la que definió como una “línea raquítica del crecimiento”.