La causa real del enfrentamiento que protagonizaron este martes maestros en Uruapan, es el rechazo a que se mantenga en la dirigencia Víctor Zavala Hurtado, quien en febrero cumplió su periodo estatutario y debe propiciar el proceso de renovación en la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), manifestaron voceros de la organización gremial.
De acuerdo a las versiones, donde hubo reticencia a identificarse por presuntas represalias, la situación generada en la asamblea regional representativa planteada en Uruapan y en donde con sillazos y golpes se enfrentaron docentes, es “la prueba de que a Víctor Zavala ya no se le reconoce como dirigente” en varias regiones educativas, principalmente en la IX de Educación Indígena radicada en Uruapan, en Pátzcuaro y en Caltzontzin, además de la representación en el puerto de Lázaro Cárdenas.
Cabe señalar que en estas regiones, se concentra la mayor resistencia al liderazgo de Zavala Hurtado, manifiesta en la pasada movilización magisterial de febrero, cuando se activaron en varios puntos los bloqueos a vías férreas y se registró la oposición a su retiro en tales regiones, cuando el gobierno federal así lo condicionó para instalar la mesa tripartita de negociaciones, situación que incluso fue destaca por el presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando al referirse a las reticencias para levantar las movilizaciones adujo que obedecían a diferencias entre grupos internos.
Según los maestros que estuvieron en Uruapan durante la gresca, en la asamblea regional representativa se le pidió a Zavala explicara porqué inhabilitó a la Comisión de Vigilancia al desconocer unilateralmente a sus integrantes, lo que habría dado pie a la discusión y posterior enfrentamiento, por lo que llamaron a que el Comité Ejecutivo Seccional emita la convocatoria y se propicie la renovación de la dirigencia.
Este miércoles, el área de prensa de la CNTE envió un comunicado donde además de reiterar que la asamblea en Uruapan se declaró en receso tras los incidentes, se acordó presuntamente entre las partes en conflicto la no agresión ni física ni verbal, al igual que llaman a la “alerta máxima por la posible aprobación de la reforma educativa en la Cámara de Diputados” del Congreso de la Unión, donde se mantiene un plantón del magisterio democrático en previsión de una posible sesión del pleno que aborde el tema.
