César Vázquez / @LetraMia
El presidente de la organización civil Michoacán sin Barreras, Florencio Muñoz Del Castillo, inició una huelga de hambre en la puerta del Congreso del Estado, donde tiene una alcancía para pedir a la gente que le cooperen para poner un elevador en el recinto legislativo y puedan llegar a las audiencias las personas en silla de ruedas, los débiles visuales o personas discapacitadas.
Ello tras asegurar que el mismo Congreso del Estado aprobó 3 millones de pesos para instalar un elevador, pero los legisladores ‘desaparecieron’ el recurso.
La huelga de hambre también es para denunciar que los diputados están violando las mismas leyes que ellos aprobaron para hacer una mejor inclusión de las personas con capacidades diferentes, pues se niegan a poner un elevador diciendo que es un edificio ‘histórico’, y no se puede tocar.
“Pero este es un pretexto perverso, todos los edificios del Centro de la Ciudad donde hay una dependencia pública son históricos; pero también hay edificios históricos donde hay hoteles y restaurantes, y allí sí hay elevadores; el palacio municipal es edificio histórico, y allí también hay un elevador”, denunció Francisco Muñoz.
El también integrante del Consejo Ciudadano de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), denunció que es el congreso el primero en violar las leyes que ellos mismos aprueban, porque aprobaron un decreto donde en cada dependencia pública la plantilla de trabajadores tiene que estar integrada al menos con el 3 por ciento de personas con capacidades especiales, y en el congreso no hay empleados con esta consideración.
Denunció que el diputado priista Olivio López Mújica es el principal responsable, porque es el presidente de la Comisión de Gobernación y el que más presume de dar atención a las personas con capacidades diferentes.
Al mismo tiempo que Florencio Muños explicaba los argumentos de su molestia, a unas cuadras no lejos de allí, una camioneta del Instituto de Vivienda del Estado de Michoacán (IVEM) se encontraba estacionada en la rampa para los discapacitados, haciendo valer la impunidad con la que se conducen las autoridades de gobierno.