Durante una reunión en la Casa Blanca este lunes, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, expresaron una postura común en contra de la participación de personas transgénero asignadas como hombres al nacer en competencias deportivas femeninas. El tema surgió cuando Trump preguntó a Bukele si en su país “los hombres participan en deportes femeninos” o si “los hombres boxean con mujeres”, a lo que el mandatario salvadoreño respondió: “Eso es violencia”.
Ambos líderes coincidieron en que permitir este tipo de competencia representa “abuso contra una mujer”. Trump subrayó que, aunque en ciertos deportes podría parecer irrelevante, la participación de hombres en categorías femeninas puede poner en riesgo a las mujeres, al considerar que “son muy peligrosos para ellas”.
“Esto no se trata de liberales o conservadores, es sentido común”, remarcó Trump.
Por su parte, Bukele recordó que hace alrededor de una década los movimientos feministas impulsaron leyes para frenar los abusos de hombres hacia mujeres, pero criticó que ahora, “algunas de esas mismas personas intentan revertirlo promoviendo leyes que permiten a los hombres abusar de las mujeres en el deporte”.
“Si lo haces en el deporte, simplemente no tiene sentido”, añadió.
Política de género en Estados Unidos
Desde el inicio de su mandato en enero, Trump ha impulsado una política de género que reconoce únicamente dos sexos: masculino y femenino. En febrero, firmó un decreto que prohíbe la participación de atletas trans en deportes femeninos y ordenó al Departamento de Educación revocar títulos y reconocimientos otorgados “injustamente” a mujeres trans.
A finales de marzo, Trump reforzó su postura señalando que, sin importar los tratamientos médicos o quirúrgicos, una persona transgénero “nunca podrá convertirse en mujer”. “No importa cuántas cirugías te hagas o cuántas sustancias químicas te inyectes, si naces con ADN masculino en cada célula de tu cuerpo, no serás mujer”, afirmó.