Redacción / @Michoacan3_0
Los sucesos violentos ocurridos la noche y la madrugada del 26 y 27 de septiembre en Iguala, Guerrero, dejó a más de 800 víctimas directas, entre muertos, heridos, desaparecidos, perseguidos, y familiares que han tenido que lidiar con las consecuencias, reportó este domingo el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El informe de la organización “Los temas claves del Informe Ayotzinapa del GIEI”, reveló que aparte de los 43 estudiantes desaparecidos de la Normal de Ayotzinapa, también existen 180 víctimas directas, entre ellos seis personas asesinadas, más de 40 heridos, 80 víctimas de persecución y atentados, más de 30 personas que sufrieron ataques contra la vida, así como 700 familiares directos de las víctimas.
La Comisión Interamericana expresó la importancia de brindar atención y prevención a todos los involucrados en los hechos violentos de Iguala, pues todos han tenido que lidiar durante casi un año con las reacciones, las consecuencias, el dolor, el miedo y la frustración, por lo que se debe de realizar un programa de atención a las víctimas.
Para esto último, recalcó que es necesario realizar una reconstrucción de los hechos a través de entrevistas con los familiares de los desaparecidos, asesinados y heridos, así como de aquellos sobrevivientes, para poder así cubrir las necesidades de atención de las víctimas.
El pasado 6 de septiembre, el GIEI dio a conocer un informe donde desmintió al Gobierno Federal sobre la versión de que los 43 estudiantes desaparecidos fueron asesinados e incinerados en el basurero municipal de Cocula por miembros de los Guerreros Unidos, al señalar que de ser cierto la versión oficial, los jóvenes tuvieron que haber sido cremados en hornos especiales.
