Alejandro Baltazar/ @Doncaracol3_0
Morelia, Michoacán.- Sobrepoblación, autogobierno y corrupción, entre otras características que transgreden los derechos humanos de los internos, son sólo algunas de las características que presentan los Centros de Readaptación Social en Michoacán.
En días pasados el presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) José María Cázares Solórzano, señaló que los Centros de Readaptación Social de la entidad no cumplen con instalaciones que salvaguarden los mínimos en materia de derechos humanos para con los reos.
Señaló que los centros penitenciarios de Michoacán se encuentran con una población por encima de la media nacional, esto, debido a que no se cuentan con penales federales, siendo el de Mil Cumbres el que se encuentra más saturado con el 80 por ciento de ocupación.
La sobrepoblación y la corrupción dentro de los Centros han sido dos de los problemas más importantes que han mostrado los centros penitenciarios en el estado, prueba de ello es que sólo en el mes de julio se han encontrado infracciones graves.
Una de ellas, cuando agentes ministerial de la Procuraduría General de Justicia del estado, a través de un cateo, decomisaron una pistola, dosis de droga (sin especificar cuál), un arma de fuego así como encontraron “damas de compañía”, entre ellas una menor de edad, en el CERESO de Morelia.
Lo que derivó en que el pasado 19 de julio se le dictó auto de formal prisión al jefe de custodios del penal Francisco J. Múgica, por el delito de corrupción de menores, esto tras ser detectada la menor de edad, ya mencionada, dentro del Centro con bebidas embriagantes durante un operativo.
Por tal negligencia se emprendió una Averiguación Previa por parte de la PGJE que derivó en la acción penal contra el jefe de custodios, además, trascendió por declaración de la menor de edad que el personal del Centro conocía su edad y motivos de entrada al penal sin que su ingreso fuera negado en ninguna ocasión.
De la misma forma se ubicaron irregularidades de similar índole, como decomiso de equipos de telefonía celular y droga, en los Centros de los municipios de Maravatío, Zitácuaro, Charo, Apatzingán y Uruapan.
De este último, familiares de internos, acusaron el pasado 10 de julio, que ese día de visita ésta les fue negada, argumentando que los internos serían trasladados sin que se les informaran los motivos de dicha acción, por lo que los familiares denunciaron a los medios esta irregularidades.
El penal de Uruapan, en conjunto con el Francisco J Múgica de Morelia, fueron señalados, por sus deficiencias de infraestructura y condiciones, como urgidos a ser cerrados, esto señalado por José María Cázares.
Cabe recordar que meses atrás, en febrero de este año, internos del CERESO Francisco J. Mújica se enfrentaron a otros tras acusar que eran extorsionados y se les cobraba “piso” así como cuotas por varios servicios, lo que autoridades del Centro redujeron a una disputa por el aumento del pan al interior del centro penitenciario.
Por su parte, los internos acusaron que era el propio comandante encargado quien ordenaba los cobros por uso de televisión, radio, incluso los alimentos, además de cuotas por otros servicios.
