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Cáncer de próstata

Carlos Bauer

El cáncer de próstata es el más común entre los hombres mexicanos: 1 de cada 5 casos de cáncer en la población masculina estimados en 2012 fueron de próstata. Sin embargo, éste es un cáncer que provoca pocas muertes comparado con el número de casos.

Por ejemplo, aunque en 2012 el cáncer de pulmón sólo representó el 8.3% de los casos de cáncer en hombres, fue causante de 12.8% de las muertes en esta población. En cambio, el cáncer de próstata representó el 21.4% de los casos y el 16.5% de las muertes.

Esto se debe a que en la mayoría de los hombres el cáncer de próstata tarda mucho tiempo en desarrollarse y es un tipo de cáncer menos agresivo que otros, es decir, que normalmente no se disemina a otras artes del cuerpo con rapidez.

De hecho, se ha descubierto que muchos hombres que murieron a edad avanzada por otras causas tenían cáncer de próstata sin saberlo, y nunca sufrieron alguna molestia por la enfermedad. Esto no significa que deba restársele importancia ni descuidar la salud, sino que existen buenas oportunidades de evitarlo o de tratarlo exitosamente cuando se presenta.

¿Qué es?

La próstata es una glándula que sólo existe en los hombres. Se encuentra ubicada debajo de la vejiga y tiene la función de producir parte del líquido seminal que transporta y nutre a los espermatozoides. Es atravesada por la uretra, el tubo que lleva la orina de la vejiga hacia el exterior de nuestro cuerpo.

En los hombres jóvenes la próstata es del tamaño de una nuez, pero conforme se envejece va creciendo por efecto de las hormonas masculinas. El crecimiento de la próstata es normal, e incluso alrededor de la mitad de los hombres de más de 50 años presenta una condición llamada hiperplasia prostática benigna, un crecimiento anormal de las células de la próstata que puede causar molestias al obstruir la uretra pero que no pone en riesgo la vida.

Como todos los tipos de cáncer, el de próstata es un crecimiento anormal y descontrolado de las células. El tipo más común de cáncer de próstata es el adenocarcinoma, un tipo de cáncer originado en las células glandulares, es decir, las que producen y liberan sustancias en el cuerpo, como el moco, los jugos digestivos o en este caso el líquido seminal.

Aunque no se conoce con certeza cómo inicia un cáncer de próstata, se cree que se desarrolla como cambios muy pequeños en las células de la glándula que luego van haciéndose más grandes. Pero aunque la mitad de los hombres de más de 50 años presentan estos cambios en las células, sólo una pequeña parte de ellos llegará a tener cáncer de próstata.

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¿Cuáles son los factores de riesgo?

Aunque es muy común, la realidad es que se desconocen las causas del cáncer de próstata. No se ha logrado establece por qué un hombre llega a padecerlo y otro no. Aunque esto sucede con todos los tipos de cáncer, en este caso la determinación de los factores de riesgo es muy vaga.

El único factor de riesgo para el cáncer de próstata que se conoce con certeza es la edad: rara vez se presenta en menores de 40 años y la mayoría de los casos ocurre en hombres de más de 65 años. Otro factor conocido es la raza, pues en Estados Unidos los afroamericanos tienen mucha más probabilidad de padecerlo que hombres de otros grupos étnicos. Sin embargo, la prevalencia de este cáncer en África es menor, así que no puede establecerse con certeza la razón.

Un tercer factor en el que hay certeza son los antecedentes familiares. Si su padre o alguno de sus hermanos tuvieron cáncer de próstata, un hombre tiene mayor probabilidad de padecerlo también, sobre todo si se presentó a edad temprana en sus familiares.

Fuera de estos factores que no se pueden evitar, lo único que se sabe es que consumir carnes rojas o lácteos altos en grasa podría incrementar el riesgo de este cáncer.

También se ha estudiado a la obesidad, el tabaquismo, la falta de ejercicio  y un virus de transmisión sexual como factores de riesgo para el cáncer de próstata, pero hasta ahora no se ha podido asegurar nada sobre su incidencia en la probabilidad de tener este tipo de cáncer.

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¿Cómo puedo saber si tengo cáncer de próstata?

Además de desconocerse las causas de este cáncer, es posible tenerlo sin experimentar síntomas a menos que se encuentre en una fase muy avanzada. Los síntomas están relacionados con problemas al orinar, pues debe recordarse que la próstata rodea a la uretra y que el cáncer de próstata es un crecimiento anormal de las células prostáticas:

·         Inhabilidad para orinar.

·         Dificultad para empezar o detener el flujo de orina.

·         Necesidad de orinar frecuentemente, especialmente durante la noche.

·         Flujo débil de orina.

·         Flujo de orina que comienza y se detiene.

·         Dolor o ardor al orinar.

Otros síntomas son los problemas de erección, la presencia de sangre en la orina o en el semen y el dolor frecuente en la parte baja de la espalda, las caderas o la parte superior de los muslos.

Existen dos pruebas de detección temprana para el cáncer de próstata, pero ninguna de ellas puede dar resultados concluyentes, ya que sus resultados pueden indicar tanto cáncer como otras formas de crecimiento de la próstata, como una inflamación o una hiperplasia prostática benigna.

Esas pruebas son el examen rectal digital –la introducción de un dedo por el recto para buscar anormalidades en la próstata– y el análisis de sangre para antígeno prostático específico, que muestra si existe un crecimiento anormal en la próstata.

Si se presentan síntomas de cáncer de próstata y estos exámenes arrojan resultados positivos, deberán realizarse pruebas adicionales como un ultrasonido o una cistoscopia, que es la introducción de un tubo con una cámara por la uretra. Pero la única prueba concluyente es la biopsia, la obtención de una muestra de tejido de la próstata que se observa en el microscopio para detectar anormalidades en las células

¿Qué puedo hacer para prevenirlo?

Debido al desconocimiento preciso de las causas del cáncer de próstata, su prevención no juega un papel tan importante como en los cánceres de pulmón o cervicouterino.

Sin embargo, hay algunas recomendaciones generales que podrían reducir el riesgo. Éstas se basan en estudios sobre cáncer de próstata y en los factores más conocidos para el cáncer en general:

·         Evitar el sobrepeso.

·         Realizar ejercicio de manera regular.

·         Consumir al menos dos tazas y media de frutas y verduras al día.

·         Algunos estudios relacionan el cáncer de próstata con una alimentación alta en calcio, por lo que sería buena idea consultar a un médico para averiguar si estamos consumiendo más calcio del que necesitamos.

·         Se ha hecho famoso un estudio según el cual la masturbación reduce el riesgo de cáncer de próstata porque al expulsar esperma se previene la formación de sustancias causantes de cáncer. Sin embargo, aunque la masturbación sea una práctica gratificante y exenta de peligros para la salud, no hay comprobación científica de que tenga efectos reales en la prevención del cáncer prostático.

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31 marzo, 2014
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