Morelia, Michoacán.- El presidente de Nahuatzen, David Otlica, había advertido desde noviembre pasado, la presencia en su municipio de un grupo criminal ligado al Concejo Ciudadano de Nahuatzen que incluso, lanzó amenazas contra las autoridades locales.
El munícipe perredista reveló en una rueda de prensa realizada el 4 de noviembre de 2018 en la ciudad de Morelia, que debido a la permanente confrontación entre el Concejo Ciudadano y las autoridades municipales, había un ambiente tenso que podría derivar en situaciones violentas.
En esa ocasión, Otlica Avilés aseguró que un grupo de pobladores afín al Concejo de Nahuatzen portaba armas, por lo que exigió la presencia de las fuerzas de seguridad.
“Traen armas de grueso calibre, no es una autoridad oficial y desconocemos por qué el gobierno no ha intervenido.
Hasta el momento hemos denunciado la situación en cuatro ocasiones y no se ha actuado, por eso exigimos de manera enérgica la intervención de las fuerzas armadas”, señaló el munícipe asesinado este martes.
Lo anterior fue narrado por el presidente municipal tras una serie de hechos violentos que ocurrieron el 1 de noviembre de 2018, cuando el Concejo Ciudadano fue señalado de agredir a trabajadores del Ayuntamiento, destrozar la casa de la síndico, y retener a un regidor de la comunidad de Sevina.
El conflicto, según explicó el edil, se generó luego de una reunión con la Secretaría de Gobernación, donde el representante del Concejo, Antonio Arreola, advirtió de la agresión bajo el argumento de que en Nahuatzen, la única autoridad que iba a gobernar sería el Concejo.
De acuerdo al presidente municipal, el día 1 de noviembre los miembros de Concejo llegaron hasta las oficinas del DIF municipal, donde estaba el despacho temporal del alcalde, y comenzaron la agresión descrita.
Pese a las advertencias hechas por el alcalde en noviembre pasado y la exigencia de seguridad, Otlica Avilés no contaba con seguridad especial.
Este martes, el presidente de Nahuatzen fue privado de su libertad en su domicilio particular en la localidad de San Isidro, municipio de Nahuatzen, y posteriormente, fue localizado sin vida en un paraje del municipio de Coeneo.