Cesar Vázquez
Morelia, Michoacán.- El Gobierno del Estado desde hace más de un año les han retenido el pago de becas a los alumnos de educación básica, apoyo que se les otorga por alcanzar altos niveles de aprovechamiento escolar.
Son un promedio de 36 millones de pesos los que el gobierno adeuda a casi 23 mil estudiantes de primaria y secundaria en todas las escuelas de educación básica de Michoacán.
De acuerdo a Héctor Pérez Sánchez, jefe del Departamento de Becas de Estímulo y Transporte de la SEE, a estos estudiantes ejemplares se les deben los pagos correspondientes a los meses que van desde enero del 2013 hasta junio del 2014 cuando terminó el último ciclo escolar.
Aunque se trata apenas 150 pesos por mes para niños de primaria y 180 pesos para estudiantes de secundaria, para los beneficiados sí es un gran aliciente, luego que este recurso sirve de estímulo para mantener buenas calificaciones.
Y es que, para estos 23 mil alumnos, los 150 y 180 pesos mensuales es el único apoyo que recibían para solventar gastos como transporte escolar o útiles escolares, ya que no reciben otro tipo de apoyos como Oportunidades.
A todos estos alumnos, muchos que incluso ya terminaron la primaria e ingresaron a la secundaria, se les adeuda prácticamente el pago de un ciclo escolar y medio, más lo que se acumule en próximos días considerando que el Gobierno del Estado no da visos de querer atender a este sector.
Estas situaciones han derivado en constantes reclamos al departamento de becas, incluso han amagado con cerrar las oficinas, aun así no hay nada que se pueda hacer para ayudarles luego que el recurso no ha sido liberado por la Secretaría de Finanzas del Estado.
De acuerdo a Héctor Pérez Sánchez, con este apoyo se venía atendiendo apenas al 3 por ciento de la matrícula estatal, cuando el resto de los estados otorga el mismo estímulo de becas a cuando menos el 10 por ciento de sus matrículas.
Incluso esta situación generó un descontento por parte de los padres de familia de los alumnos supuestamente beneficiados, quienes ya no confían en las promesas del Gobierno del Estado y que se expresa con un registro apenas del 80 por ciento de solicitudes comparado con lo que se venía recibiendo otros años.
