Sobre el pleito entre Manuel Bartlett, titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Adan Augusto López, gobernador de Tabasco, sobre las inundaciones en la entidad, el presidente Andrés Manuel López Obrador dejó en claro que el gobierno se hará cargo de los damnificados.
López Obrador reconoció que la CFE hizo un mal cálculo en el desfogue de la presa Peñitas en la primera inundación en Tabasco hace unas semanas, y que en la actual anegación “fue mucha la lluvia”.
Nosotros nos hacemos responsables de la atención a los damnificados, que es lo que he venido planteando. ¿Cómo se originaron las inundaciones? En la primera tormenta sí hubo un cálculo en el manejo de las presas que no resultó, porque había un pronóstico de lluvia y los técnicos decidieron desfogar agua de la presa Peñitas y no llovió como se esperaba. Ese desfogue causó inundación, pero no como ahora, fue un error de cálculo como suele pasar”, destacó.
El mandatario mexicano no quiso meterse en las declaraciones encontradas entre Bartlett Diaz y López Hernández.
El presidente López Obrador apuntó que regresará a Tabasco para supervisar las labores gubernamentales en favor de los damnificados, y volvió a alegar una campaña de desinformación por parte de los medios de comunicación.
Voy a regresar a Tabasco porque, si no, dirían que no me estoy ocupando a los damnificados de mi estado. No voy por eso, voy por convicción. Ha habido una campaña de desinformación en contra de nuestro gobierno, es evidente. Lo mejor es haya entendimiento, prudencia, pero que tampoco nos alarmemos”.
“Ojalá se diga que estamos atendiendo Chiapas, Tabasco y Veracruz, que hay miles de soldados a la gente y que estamos recibiendo apoyo de varios gobiernos”, destacó.