A solo un día de el clásico entre el Barcelona y el Real Madrid, un graffiti de Gerard Piqué y Sergio Ramos besándose ha aparecido en las calles de Barcelona.
El grafitero ha utilizado en esta ocasión una técnica mixta de spray y acrílico sobre mobiliario urbano, y emplea de forma metafórica la imagen de Ramos y Piqué como representantes de España y Catalunya, respectivamente, para pedir una solución dialogada al proceso independentista.
El dibujo se suma a otro de sus grafitis protagonizados por un madridista y un culé, como el que representaba un apasionado beso entre Leo Messi y Cristiano Ronaldo en 2017.
En aquella ocasión, la pintura titulada “El amor es ciego” también apareció en el Paseo de Gracia, en la marquesina de un aparcamiento. El artista italiano aprovechó entonces la coincidencia del clásico y la Diada de Sant Jordi para fundir a las dos estrellas en un beso, mientras un Messi de puntillas sostenia una rosa en su mano.
