Alina Rosas Duarte / Revolución 3.0
A la llegada de Enrique Peña Nieto a la presidencia, la centralización de las funciones de seguridad en el poder Ejecutivo, y en la Secretaría de Gobernación (Segob) ha sido evidente luego de la desaparición de la Secretaría de Seguridad Pública federal, lo cual resulta problemático históricamente.
En entrevista con REVOLUCIÓN TRESPUNTOCERO, el investigador Miguel Moguel, del Centro de Análisis e Investigación Fundar, señala que hay un retroceso en el tema de seguridad y derechos humanos con la creación de la Gendarmería Nacional recién puesta en marcha.
“Tenemos una historia que no muchas décadas atrás nos habla del poder que adquiere el Estado, -y en este momento concreto valdría la pena decir el Ejecutivo Federal, una suerte de nuevo presidencialismo- donde el control de las fuerzas de seguridad, desde la seguridad hasta la seguridad pública quedan contenidas bajo el mando y poder del ejecutivo, cosa que en la democracia debería tener reales contrapesos”, advierte.