La efectividad en la búsqueda de desaparecidos sólo puede darse con la inclusión de los familiares, consideran activistas quienes destacan la urgencia que en Michoacán se eche a andar la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas.
En entrevistas por separado, Mercedes Ruiz González de la organización “Familiares Caminando por la Justicia”, y Cristina Paredes Lachino del Comité de Familiares de Personas Detenidas Desaparecidas en México (Cofaddem) “Alzando Voces”, coincidieron en que la búsqueda de personas no puede darse ajena a los esfuerzos de los familiares.
El domingo el presidente Andrés Manuel López Obrador formalizó la reinstalación del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas para trabajar en la localización de más de 46 mil desaparecidos en el país. En ese contexto el gobernador Silvano Aureoles Conejo se pronunció por crear la Comisión Estatal de Búsqueda.
Sin embargo las dudas sobre el accionar gubernamental en lo federal y estatal siguen latentes, pues no se tiene claridad de la manera en que participarán los familiares en este proceso de búsqueda, ni la manera en cómo se les va involucrar en los trabajos.
En el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED), se tenía datos acerca de que en Michoacán entre 2007 y enero de 2016 había mil 66 personas desaparecidas.
Ahora el RNPED ha dejado de funcionar y su base de datos pasa a manos de la Comisión Nacional de Búsqueda, la cual será la encargada de actualizar y realizar los reportes estadísticos.
De acuerdo con Cristina Paredes Lachino, recuerda que la creación del Sistema Nacional de Búsqueda es resultado de una lucha histórica de los colectivos de familiares de personas desaparecidas, los cuales, empujaron fuertemente para la elaboración de la Ley, y han visibilizado la gravedad de este problema.
Por ello considera que un trabajo de búsqueda sin el acompañamiento de los familiares está condenado al fracaso, y que las reglas para que dicho acompañamiento se dé deben ser claras y transparentes.
En el caso de Michoacán apunta que no se ha tomado en cuenta a las familias, sin que hasta el momento exista claridad acerca de cuándo y cómo se creará la Comisión Estatal de Búsqueda.
“Por eso la consigna es que sin las familias nada, porque son éstas a través de los colectivos las que tienen el panorama claro de la situación debido al trabajo que se ha venido desarrollando por años”.
A su vez Mercedes Ruiz González señaló que la organización Familiares Caminando por la Justicia se manifestaron frente a Palacio Nacional el cuatro de febrero, a partir de lo que tuvieron una reunión con funcionarios de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación.
“Entre nuestros reclamos cuestionamos el que sólo ciertos colectivos hayan sido convocados para la presentación y para el trabajo; finalmente fuimos convocados ayer para la reinstalación del Sistema Nacional de Búsqueda”.
Refiere que en el evento tuvieron una charla con el gobernador Silvano Aureoles, en donde le plantearon la necesidad de que se ponga en marcha el Consejo Estatal, “de hecho el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió en el evento a que en septiembre próximo ya estén instalado todos los consejos en los estados.
“Nosotros como familiares nos acercamos al gobernador y le dijimos que el Consejo es urgente, le preguntamos que cuándo va a lanzar la convocatoria y dijo que ya está trabajando en el asunto”.
Asimismo solicitarían apoyo del estado en los trabajos de la Quinta Campaña de Búsqueda que se realizará en Michoacán entre el 29 de abril y 12 de mayo.
“En estos temas necesariamente tenemos que estar involucrados los familiares, a pesar de que nosotros estamos claros que es obligación del Estado la experiencia es nuestra, todos los avances que se han tenido en cuanto a búsqueda y leyes han sido producto de la lucha de los familiares”.
De acuerdo con Mercedes Ruiz, Michoacán se encuentra entre los primeros lugares del país con desaparición de personas, y refirió que persisten las desapariciones en territorio estatal.
Asimismo señaló que el rango de edades de personas desaparecidas tiende a disminuir, “entre 2010 a 2016 eran frecuentes las desapariciones de personas entre los 18 y 35 años, pero a partir de 2016 empezó a disminuir el rango, aunque las características del fenómeno varían dependiendo de la zona, en la Costa michoacana por ejemplo, vemos un alza en la desaparición de mujeres”.