A un día de celebrarse el día de las madres (10 de mayo) en lo ancho y largo de la república mexicana, al menos unas 50 mujeres con hijas desaparecidas o asesinadas recordaron a sus familiares a través de una misa católica donde señalaron que ese día lo único que les recuerda es la impunidad de este país
El 10 de mayo “es de lucha y no de celebración”, apuntaron las mujeres que iban acompañadas por los familiares de las víctimas e integrantes de organizaciones civiles, como el Centro para el Desarrollo Integral de la Mujer.
José Luis Castillo, padre de Esmeralda Castillo Rincón, cuyo paradero se desconoce desde 2009, pidió a las autoridades de los tres niveles de gobierno realizar labores de prevención en las zonas donde han sido secuestradas las jovencitas.
Señaló que desde hace 20 años que se conocieron a las primeras víctimas de feminicidios, las autoridades siguen sin actuar en contra de los responsables.
La agrupación Madres, Padres y Familiares con Hijas Desaparecidas y Asesinadas y el colectivo Iniciativa Feminista Hijos de su Maquilera Madre solicitaron al gobierno de César Duarte que profundicen las investigaciones para conocer los homicidios que ocurren en la frontera.
“Somos niñas, mujeres, trabajadoras; no mercancía” fue la consigna de los manifestantes, quienes colocaron una ofrenda floral en recuerdo de las víctimas de feminicidios, con motivo del día Internacional de la Mujer.
Según datos de la Fiscalía especializada en atender violencia contra las mujeres por razones de género, la mayoría de las adolescentes desaparecidas en Juárez fueron contactadas en las redes sociales por personas que las convencieron de abandonar sus casas.
