Anna Rosales / Hablemos de sexo y amor
“Hay muchas razones para que el condón femenino sea utilizado de forma más generalizada en nuestra región”, sostiene la costarricense Ana Gabriela Solano. Si bien su uso aún no es muy difundido, la especialista de la CIPAC de Costa Rica es una convencida de que este método de protección contra enfermedades de transmisión sexual y prevención de embarazos, se puede abrir paso también en Latinoamérica.
“Está elaborado de poliuretano, mide alrededor de 17 centímetros, es más ancho que el condón masculino y está hecho de acuerdo a nuestra anatomía”, sostiene Solano.
Razones de salud
La especialista considera importante su uso porque, según instituciones internacionales, hay un aumento de enfermedades de transmisión sexual en Centroamérica, en específico de casos de sífilis congénita. “Y los servicios de salud no ofrecen información adecuada sobre el tema o existen prejuicios, generalmente de grupos conservadores, para hablar sobre el mismo. Consecuencia de ello es que no todas las personas ven el condón femenino como una herramienta de protección y como un derecho que tiene la mujer para cuidarse y proteger su cuerpo”.
La brasileña Simone Martins, por su parte, cuenta que en Brasil el condón femenino tiene un uso más difundido, sobre todo desde que las autoridades distribuyen el método de forma gratuita en parte de la población. ”En 4 años desde que comenzó al distribución, aumentó el uso entre las usuarias que recibieron el condón. De 4 millones con que comenzamos vamos ya a distribuir 20 millones, porque hay más compromiso de las autoridades de salud y de educación”.
Pero también placer
Los condones femeninos no sirven solamente de provecho para las mujeres. Los hombres sienten placer cuando el pene roza el anillo interior del condón femenino, enfatiza Solano. Ella recomienda a las mujeres y sus parejas “que se animen a utilizarlo no sólo para protegerse, sino para disfrutarlo”.
Solano y Simone estuvieron presentes en un encuentro Internacional del Programa de Acceso Universal al Condón Femenino (UAFC), en la Haya, en 2011.