Derechos Humanos


El fin del sueño americano

Rodrigo Caballero/ @RodCaballero

Morelia, Michoacán.-Fueron tres las veces que ‘la migra’ detuvo y deportó a Antonio Zambrano Montes de 35 años de edad; tras su última deportación había decidido legalizar su estancia y había empezado a tramitar su visa para trabajar en los Estados Unidos de América. El sueño de una ciudadanía terminó cuando tres oficiales de policía dispararon en 17 ocasiones contra él.

El asesinato de Zambrano fue el segundo de tres ataques en menos de un mes contra connacionales en los estados de Texas, Washington y California. Zambrano Montes era uno de los cuatro millones de inmigrantes michoacanos que viven en los Estados Unidos.

Las autopsias y sus contradicciones

Al cuerpo del michoacano se le realizaron dos autopsias, la de ley que hizo el departamento de policía de Pasco en el estado americano de Washington y la segunda hecha por un médico particular contratado por Charles Herrmann, el abogado de la familia de Antonio.

La diferencia esencial entre ambas, realizadas con 24 horas de diferencia, es que el departamento de policía registró fueron entre cinco y seis tiros los que recibió Antonio y negó haberle disparado por la espalda al mexicano.

Un día después, el jueves 26 de febrero, Charles Herrmann declaró a la prensa que fueron ocho los disparos que mataron a Antonio Zambrano incluidos dos en el antebrazo y en los glúteos lo que significa que los policías sí lo atacaron por la espalda. Lo que ninguno de los exámenes negó fue que el connacional estaba desarmado al momento del ataque.

De acuerdo con la Secretaría del Migrante en el Estado, Antonio Montes es el primer michoacano que muere en dichas circunstancias en lo que va del año, sin embargo, en 2014 fueron ocho los que tuvieron una muerte violenta aunque ninguna relacionada con la policía.

“No es un hecho aislado”

En un comunicado de prensa, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) le exigió al Departamento de Justicia de los Estados Unidos una investigación seria apegada a su división de Derechos Civiles “estos incidentes no pueden verse de manera aislada” aseguró.

Sin embargo, la SRE fue más allá al asegurar que los sucesos preocupan a la institución puesto que podrían generar “una fractura de confianza entre la comunidad hispana y las fuerzas policiacas derivados de estos hechos”.

Hasta el momento las investigaciones de las muertes de los tres mexicanos continúan, sin embargo, también continúa la amplia protección que los departamentos de policía ofrecen a sus oficiales, no únicamente en la muerte de los latinos sino también en la de seis ciudadanos afroamericanos que fueron asesinados por policías a lo largo de los Estados Unidos.

Piedras contra balas

En el video subido a Youtube puede verse a Antonio Zambrano mientras huye de los disparos tras soltar las piedras con las que supuestamente estaba agrediendo a los oficiales, sus familiares aseguran que trataba de huir para ponerse a salvo ya que levantaba las manos cuando los policías comenzaron el tiroteo.

Los restos de Antonio llegaron a Guadalajara, Jalisco el jueves 5 de marzo y fue sepultado en Aquila, Michoacán el domingo 7 en compañía de sus familiares y vecinos; la mayoría de ellos uniformados con una camiseta que tenía una fotografía suya y la escena del video que muestra su asesinato.

Los pobladores de La Parotita aseguran que no dejarán morir el caso ya que tienen contacto con los abogados en los Estados Unidos y ya demandaron al poblado de Pasco. Hasta el momento no se sabe a ciencia cierta qué sucedió el pasado 10 de febrero en aquella población estadounidense pero parece que Antonio jugaba rayuela en la calle y este simple hecho desató su ataque.

La mamá de Antonio, doña Agapita Montes aseguró “así sea que me lleve todo lo que resta de vida, no descansaré hasta que los asesinos estén en la cárcel donde tienen que estar”.

11 marzo, 2015
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