Rodrigo Caballero / @RodCaballero
Llegó solo, sin comitiva ni equipo de seguridad ni gaviota. El viernes 16 de marzo de 2012 Manuel Guillén Monzón, un empresario y luchador social moreliano sentó un precedente: ser el primer candidato independiente que le entregó sus papeles de registro al consejero-presidente Leonardo Valdés Zurita.
El registro de Monzón se dio un día después del de Enrique Peña Nieto, llegó a las instalaciones del extinto Instituto Federal Electoral (IFE) y de inmediato fue canalizado a un área distinta. “Éramos 62 aspirantes, ellos se dejaron ningunear, yo no” recuerda Manuel Guillén.
“llegué en la mañana… no me atendieron y me instalé en huelga de hambre si no se me daba el mismo trato que a Peña Nieto que hasta alfombra roja le pusieron y a las 12 de la noche tuvo que salir Valdés Zurita a recibirme el registro… no gané pero senté un precedente” narraba mientras apuntaba garabatos en su libreta.
Pocas personas lo saben pero en 2012 hubo un total de 62 candidatos independientes que se registraron para pelear por la Presidencia de la República. Entre ellos Manuel Monzón quien ha contendido tres veces para gobernador de Michoacán y dos veces para presidente de México.
Manuel Guillén ingresó nuevamente su solicitud para las elecciones de junio de 2015 junto a otros 27 aspirantes e incluso creó un organismo llamado Ejército Ciudadano de Liberación Electoral. Sin embargo, fue parado en seco junto a otros tres miembros.
El pasado jueves 15 de enero el Instituto Electoral de Michoacán (IEM) desechó su solicitud como aspirante a gobernador; acorde con Monzón, las condiciones son inalcanzables porque así las plantean los propios partidos políticos. “Es un camino largo y tortuoso el de ser candidato independiente” afirmó.
Los interminables candados
Aunque la cifra de posibles candidatos independientes fue celebrada con bombo y platillos por el Instituto Electoral de Michoacán, lo cierto es que los 20 aspirantes sólo han pasado el primero de los tres filtros instalados por la Reforma Electoral de 2014.
Estos filtros han sido calificados por algunos de los aspirantes como casi imposibles, maquiavélicos, burlescos e inadmisibles. Tanto que uno de los que sí pasaron el primer filtro, Alberto Moreno Zamudio, está considerando renunciar a la candidatura.
Alberto Moreno, abogado y jurista de Morelia, busca ser diputado en el distrito número 10 de la capital por medio de una candidatura independiente y aunque pasó la primera etapa considera la siguiente, conocida como “obtención del respaldo ciudadano”, casi imposible.
Acorde con los requisitos del Instituto Nacional Electoral (INE), Alberto tiene que conseguir por sus propios medios el respaldo del dos por ciento del electorado; lo que en el distrito 10 representa a 2, 946 personas, cada una de ellas tiene que acudir personalmente con su credencial de elector a registrarse ante la junta distrital en menos de 20 días.
“Eso equivale más o menos a 150 personas diarias, que tienen su trabajo, sus ocupaciones y que necesitan transporte para trasladarse, es matemáticamente imposible” detalló indignado el aspirante.
En entrevista con Michoacán Tres Punto Cero, Alberto Moreno, declaró que las candidaturas independientes son “la burla más grande que le han hecho a los michoacanos”.
Para éste momento, Alberto Zamudio tuvo que cubrir los requisitos del llamado “registro de aspirantes” como son: Un programa de gobierno, un acta constitutiva, la creación de una asociación civil, una cuenta bancaria a nombre de la asociación civil y otros documentos personales.
El aspirante trabajó con un equipo de 12 personas y tardó tres días para que cumplir con los requisitos; acorde con Zamudio invirtió un total de seis mil pesos, dinero que nunca va a recuperar.
Por su parte, Manuel Guillén Monzón no presentó más que los documentos personales y explica que “en la constitución claramente dice ‘para ser elegido como gobernador tienes que ser mayor de 35 años, mexicano y michoacano de nacimiento’ eso es todo”.
-Por qué se saltan a la propia constitución, eso está en el artículo 82, por qué no respetan a la Carta Magna- se pregunta mientras enfatiza con las manos.
– y ¿Por qué cree usted que lo hacen?
– Pues porque detrás están los partidos políticos, detrás de las leyes que aprueba el Congreso de la Unión y el Congreso del Estado están las decisiones maquiavélicas de los partidos políticos.
El dinero es el mayor limitante
Alberto Moreno tuvo la forma de solventar algunos de los gastos en la primera etapa, sin embargo la segunda es muy distinta, el INE colocó un tope de campaña de 3 millones y medio de pesos. “Yo no voy a gastar mucho porque no quiero caer en el tema de los llaveritos y las sombrillas no tengo ese dinero” asegura el abogado moreliano.
Cabe destacar que ninguno de los candidatos puede acceder a dinero público en ésta etapa y si consiguen más de 3 millones y medio de pesos caerían en falta y su candidatura podría ser anulada.
Según detalló el consejero del IEM, José Román Ramírez Vargas, una de las razones por las que se les pide una cuenta bancaria es para vigilar los topes de campaña, “incluso, al ver las cuentas podemos saber de dónde proviene en caso que sea financiamiento del crimen organizado por ejemplo”.
Acorde con el INE, la vigilancia de los presupuestos va a ser prioritaria en las elecciones de 2015. El instituto va a controlar los topes, las cuentas y la fiscalización de los recursos, por eso cada vez que un precandidato gaste algo tiene que reportarlo inmediatamente.
-Imagínate, señala Manuel Guillén, tienes que comprobar lo que te gastes, ¡de tu propio dinero! Y si te pasas ¡aguas! porque ese dinero te lo confisca Hacienda y si tú ya prometiste algo a quienes te apoyaron pues ni modo, quedas fuera.
Sin importar si un candidato independiente tenga o no suficiente dinero está estrictamente prohibida la propaganda en radio y televisión, sin embargo, no lo está para los partidos políticos.
José Román, consejero del IEM, detalló que siempre y cuando digan “spot dirigido a miembros del partido” no tienen problema alguno. A pesar de ello Román Vargas no cree que eso sea injusto, “ellos tendrán que hacer una campaña de mayor acercamiento con las personas” subrayó.
Sin comerciales en radio y televisión, candidatos independientes como Francisco Gerardo Becerra, el único aspirante a gobernador que pasó el primer filtro, tendrá que viajar por 30 días de distrito en distrito convenciendo al dos por ciento del electorado, es decir, deberá “acercarse personalmente” a unas 70 mil personas y convencerlas de registrarse.
“Como candidatos independientes no tenemos infraestructura como sí la tiene un partido político o un sindicato, ellos nada más organizan asambleas y dicen voten por éste y listo” afirma Manuel Guillén.
Los políticos con disfraz de ciudadano
Como ya se mencionó son 20 los aspirantes que lograron atravesar el primer filtro del INE, sin embargo, entre ellos está Alfonso Martínez Alcázar, diputado local y ex-integrante del Partido Acción Nacional que aspira a la alcaldía de Morelia.
Alfonso Martínez se desempeñó como presidente de la mesa directiva del Congreso del Estado de Michoacán y hoy busca ser alcalde bajo la bandera de candidato independiente, ésto, a pesar de la protesta de representantes del Partido Acción Nacional (PAN), Partido del Trabajo (PT) y Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
El ex-presidente de la mesa directiva y aún diputado no renunció en tiempo y forma ni a su partido político –el PAN- ni a su cargo y aun así fue defendido por los consejeros del IEM quienes lo respaldaron de manera unánime.
Acorde con la convocatoria del propio IEM, quien busque una candidatura independiente tiene que haber renunciado un año antes de la elección a su partido y un mes antes de la convocatoria a su cargo público, Alfonso Martínez no cumple ninguno de dichos requisitos que supuestamente son “motivo de desecho de una solicitud”.
La sesión del IEM donde se ratificó al todavía diputado Alfonso Martínez comenzó una hora y media tarde, motivo por el cual el representante del PAN, Javier Antonio Mora, acusó a consejo de solapar a Martínez Alcázar y preparar una defensa previa a la sesión.
Sin embargo, Alfonso Martínez no es el único político inmiscuido dentro de las candidaturas independientes; en una investigación realizada por Michoacán Tres Punto Cero se comprobó que solamente 10 de los aspirantes son ciudadanos sin ninguna afiliación política.
Por ejemplo, Abel Osorio Soto e Ismael Garduño García, aspirantes a las presidencias municipales de Zitácuaro y Carácuaro respectivamente, pertenecieron al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Inclusive, Abel Osorio ya fue en una ocasión presidente municipal en Carácuaro y lo relevaron de su cargo, con la llegada de los grupos de autodefensas, por supuestos vínculos con el cártel de los Caballeros Templarios; posteriormente fue expulsado del municipio por el Ejército Mexicano.
Por otro lado, los aspirantes de Tumbiscatío, Morelia y Lázaro Cárdenas han tenido cargos públicos con anterioridad. Fidencio Rodríguez Aguirre, ahora aspirante a alcalde, fue director de Seguridad Pública en Tumbiscatío, el municipio en el que se escondía y fue abatido Nazario Moreno González alias ‘El Chayo’ el 9 de marzo de 2014.
Otros candidatos independientes como Francisco Javier Garduño, Joel Hernández Fabián y Francisco Pelayo Flores pertenecen a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) cuya estructura pone en desventaja a los aspirantes ciudadanos.
La utilización de candidaturas independientes por políticos y miembros de sindicatos ha sido denunciada por los propios partidos políticos, el representante de Morena ante el IEM, Érick López Villaseñor señaló que estos políticos desincentivan a los ciudadanos y devalúan a las candidaturas independientes.
Desde su posición, Alberto Moreno Zamudio todavía no sabe si contenderá para ser diputado del distrito 10 de Morelia, esto aunque dice tener un gran apoyo de la ciudadanía. Zamudio destacó que no le gustaría seguirle el juego al Congreso de la Unión; “si yo ganara ellos dirían que los tiempos, los requisitos y el porcentaje son los ideales y en realidad todos sabemos que no lo son” concluyó.