Enrique Peña Nieto pasará a la historia como el mayor endeudador de México. En lo que va de su administración, la deuda gubernamental ha alcanzado los 8.33 billones de pesos, cifra que es equivalente al 46 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de la nación.
Lo anterior fue denunciado por la organización El Barzón, quien además, advirtió que de seguir con esta tendencia de endeudamiento, el panorama de México al final de sexenio no es alentador. Señalaron que si la situación se mantiene como hasta ahora, para 2018 la deuda podría representar más del 55 por ciento del PIB.
“Hoy, la deuda interna y la deuda externa de México representan el 46 % del PIB, y al final del sexenio, el endeudamiento que va a tener el gobierno mexicano superará con creces el 50% del PIB, lo que ya nos coloca en una situación de alarma, de fragilidad, porque a esto se suman problemas como la caída de los precios de petróleo, que repercute en una menor recaudación para el Estado, además de la fuga de capitales”, señaló Alfonso Ramírez Cuellar, presidente de El Barzón.
De acuerdo con lo expuesto por esta organización, con la llegada de Enrique Peña Nieto a Los Pinos la deuda del gobierno se ha incrementado en 10 por ciento con respecto al PIB. Recordaron que en 2012 la deuda gubernamental se colocó en 5 billones 890 mil millones de pesos, cifra equivalente al 36.4 por ciento del PIB.
Asimismo detallaron que en lo que va del sexenio peñanietista la deuda externa ha representado el 14.4% del PIB; mientras que la deuda interna se ha colocado como el 31.6 por ciento del PIB.
La organización de productores señaló que la administración de Enrique Peña Nieto ha acelerado el deterioro de las finanzas públicas. Además criticaron que las llamadas ‘reformas estructurales’ pueden complicar aún más el panorama, pues además que no han atraído la inversión prometida, con la venta de la riqueza nacional -como en la reforma energética- se deja en una situación de mayor vulnerabilidad al país.
El Barzón cuestionó la posición del gobierno ante esta situación delicada. Lamentó que el gobierno lejos de reducir los gastos suntuarios, los mantiene, y justifica el aumento de la deuda por la caída de los precios del petróleo y la dificultad de reducir las erogaciones.
“El gobierno de EPN ha decidido hipotecar al país”
Alfonso Ramírez Cuellar criticó la postura del gobierno frente al endeudamiento. Señaló que Enrique Peña Nieto ha decidido hipotecar al país, pues en lugar de implementar proyectos para contener la deuda, planea mantenerla para cubrir los gastos del gobierno.
“La administración de EPN ha decidió hipotecar al país. Si persiste la tendencia podríamos alcanzar para 2018 una deuda equivalente al 55 o el 60 Por ciento del PIB. Dejaría a un país totalmente hipotecado, sin posibilidades de desarrollo, porque la mayor parte de los impuestos que se capten tendrían que servir para el pago de una deuda que, encima de todo, no se ha utilizado en el desarrollo del país, sino para cuestiones de menor relevancia.”
El dirigente de El Barzón calificó la actitud de Peña ante el endeudamiento como descarada e irresponsable, al permitir que la nación se sumerja en una problemática como esta. Demandó implementar acciones inmediatas para frenar esta “catástrofe financiera”.
“La preocupación mayor que tenemos es la decisión de Peña por hipotecar prácticamente el futuro del país. Aunado al gran endeudamiento que tienen México se suman un par de problemas: debido a la devaluación del peso, tendríamos que pagar mayores intereses en dólares por la deuda, además hoy en día están llegando menos divisas al país.
Entonces estos factores: la menor entrada de divisas por conceptos de precio de petróleo, la fuga de capitales, y prácticamente el fracaso de la llegada de nuevos inversionistas a las áreas de exploración y explotación de petróleo y gas, pues conjugan un problema muy serio, donde el sacrificio de las finanzas se convierte en una voz de alerta”, señaló.
Por otro lado criticó que el gobierno “ha simulado” recortes al gasto. Declaró que los dispendios se han mantenido, los cuales han sido cubiertos a partir del endeudamiento público.
“A diferencia de Fox y de Calderón, donde teníamos una cantidad muy fuerte de entradas de dinero por concepto del petróleo y de la llegada de capitales, hoy básicamente el país se sostiene en mucho con un endeudamiento sumamente peligroso.
Lo que urge es un recorte muy profundo a todos los gastos suntuarios. Urge que se levante todo un movimiento nacional por la gravedad de la situación en la que estamos, para lograr que la serie de prebendas y de gastos que tienen los altos funcionarios, y una buena cantidad de gasto corriente -que se da con la explosión de personal de confianza, las pensiones de muchos expresidentes y de funcionarios de distinto nivel- y todo el resto de gastos sea sometido a revisión”, destacó.
Ramírez Cuellar subrayó que el endeudamiento no ha sido utilizado-como marca la Constitución-para pagar obras que permitan el desarrollo del país. Por el contrario, dijo, el dinero obtenido a través del endeudamiento se va en cuestiones menores.
“Para nosotros esto es un serio problema que en cualquier momento explota. El gobierno ya decidió, como lo hizo con Salinas, la hipoteca del país, la contratación de deuda interna y externa usando muchos de los artilugios (…)y además han usado el endeudamiento para hacer algo contrario a la Constitución, porque la constitución es muy clara cuando dice que la deuda tiene que ser sólo y únicamente para el pago de obras que permitan el desarrollo del país, y aquí buena parte del endeudamiento se va para otro tipo de rubros que no tienen nada que ver con el desarrollo productivo de México”, manifestó.
De igual forma, el dirigente barzonista aseguró que el gobierno de EPN ha fracasado en materia financiera. Dijo que la actual administración, así como las dos que la precedieron, ha actuado de manera irresponsable.
“Lo que vemos es un fracaso. No son problemas fundamentalmente externos, aquí ya hubo un crimen financiero porque se derrochó todo el dinero acumulado con la riqueza que nos dio el petróleo cuando el barril estaba por los 100 dólares; se malbarató, se hizo un dispendio absoluto en los gobiernos de Fox, de Calderón y una primera parte del gobierno de EPN. Prácticamente se actuó con una irresponsabilidad enorme porque en vez que estos recursos del petróleo fueran invertidos en el desarrollo económico del país, pues prácticamente se fue a gastos que no tenían sustento productivo”, expuso.
Ramírez Cuellar aseguró que en México nunca se había dado una deuda tan grande como la actual. Reiteró que la sociedad está en presencia de una fragilidad del país, en donde adquiere deudas, pero no tiene recursos para saldarlas.
“Lo que estamos viendo es una fragilidad enorme, pero no sólo es la fragilidad de la coyuntura, es ya la decisión de hipotecar al país. Es ver al endeudamiento público como la tabla de salvación para sostener el gasto corriente y el financiamiento de actividades superfluas que no tienen sentido productivo.
Esta decisión va a llevar a Peña como el gran endeudador de nuestro país. Nunca habíamos tenido una deuda de esta magnitud, y además sin respaldo para su pago; no tenemos precios altos de petróleo, no tenemos inversiones, no tenemos ya que rematar porque lo que se está rematando de los campos y de los pozos para la extracción de petroleros está siendo vendido a precio de ruina”, dijo.
“El Congreso debe llamar a comparecer a Videgaray”
El Barzón exigió que el Congreso de la Unión llame a comparecer a Luis Videgaray, secretario de Hacienda. La organización manifestó que el funcionario federal debe explicar por qué se ha dado el crecimiento desmedido de la deuda; además que indique a dónde han ido a parar los recursos.
“El 1 de febrero, cuando inicia el periodo ordinario de sesiones, el primer acto delCongreso de la Unión debe ser exigir la comparecencia de Videgaray para que explique este crecimiento tan explosivo, tan dramático, tan alarmante que está teniendo el endeudamiento. Y para que exista una sanción a la gestión económica que cada vez se agrava más. Y para demandar una revisión de los gastos que no tienen un efecto productivo ni una vinculación directa a los programas sociales.
Los legisladores deben obligar al gobierno a dar una explicación y demandar la reducción del gasto corriente y la erradicación de mucho del gasto suntuario que en estos momentos viene a agravar la situación de las finanzas nacionales”, apuntó Ramírez Cuellar.
El dirigente de El Barzón reprochó que Enrique Peña Nieto no está tomando en consideración a las futuras generaciones de mexicanos, pues con los altos niveles de la deuda está comprometiendo el desarrollo de la nación.
“EPN no está mirando el futuro de las generaciones próximas. Está en una actitud descarada, irresponsable, con un endeudamiento desenfrenado, que puede superar el 55% en los próximos tres años que le faltan. Vean el crecimiento del 2012 al 2015 de la deuda. Es una dinámica muy acelerada, una espiral incontrolable que de continuar a este paso pondremos en una situación preocupante, una catástrofe financiera para 2018”, concluyó.