Un grupo armado detuvo y torturó a siete integrantes de una familia originaria de la Ciudad de México, entre ellos dos menores de edad, acusados de estafar.
Viajaban a bordo de un Tsuru rojo cuando fueron retenidos por un grupo de personas que se identificaron como guardias comunitarios, en un retén sobre la carretera federal México-Acapulco.
Ocho horas después fueron liberados en un puente vehicular ubicado entre Chilpancingo y el poblado de Petaquillas.
De acuerdo a información de Proceso, los hombres armados dejaron un mensaje que decía:
“Esto va para toda la población Húngaros o Gitanos. Por primera y única vez, se les deja ir vivos. Para la otra, ni los busquen. Esto nos pasó por andar robando y estafando a la población”, señala el texto.
Las personas fueron identificadas como Hermenilda Nieves Camacho, de 54 años; Manuel López Nieves, de 33; Rosa García Marín, de 28; Suleyka Yasmín Valente López, de 17; Sandra García, de 33 y dos menores de edad.
De acuerdo a las autoridades municipales la guardia comunitaria está vinculada con el grupo delictivo de Los Ardillos. La familia se negó a presentar una denuncia formal debido a que fueron amenazados.
Con información de Proceso