Morelia, Michoacán. En Michoacán el hambre es una realidad tangible, tanto que el 54.9 por ciento de los hogares en la entidad han experimentado alguna dificultad para satisfacer sus necesidades alimentarias, según lo revelan los datos de la Encuesta Nacional de los Hogares 2016 presentada por el INEGI esta semana.
En Michoacán existen un total de un millón 260 mil hogares, de éstos, el 47.6 por ciento vive con la preocupación que la comida se les pueda terminar, y 13.6 por ciento de plano se quedaron sin qué comer.
Los datos del Instituto resultan alarmantes, y ejemplifica como los michoacanos en sus hogares se ven orillados a sacrificar su necesidad de comer.
En el caso de los menores de edad, en el 34 por ciento de los hogares han debido disminuir la cantidad de comida que se les sirve; y en el 39.9 por ciento han dejado de tener una alimentación sana y variada.
Los menores han sentido hambre y no han podido comer en el 15.3 por ciento de los hogares michoacanos, mientras que, en el 18.4 por ciento algún menor se acostó con hambre.
El 41.2 por ciento de los adultos en los hogares michoacanos tiene una alimentación basada en muy poca variedad de alimentos.
El 18.5 por ciento se han visto obligados a dejar de desayunar, comer o cenar, y el 30.8 de los adultos piensa que come menos de lo que debería.
El 34.8 por ciento de los adultos en los hogares michoacanos siente hambre pero no comió, en tanto que 24.1 por ciento sólo ha comido una vez por día o de plano no ha comido nada.
La situación de hambre orilla a que en los hogares mexicanos se realicen prácticas que hubieran preferido no hacer para conseguir comida, esto implica al 6.9 por ciento de los hogares que en términos absolutos suman 47 mil 758 hogares.
¿Qué es lo que comen en los hogares michoacanos a la semana?
De siete días que tiene la semana, en 6.8 días en promedio se consume tortilla o cualquier otro alimento hecho de maíz, trigo, arroz, avena, salvado, etcétera.
Asimismo a la semana en 6.5 días los hogares consumen cualquier tipo de aceite; mantequilla, mantequilla de cacahuate, mayonesa, crema o manteca.
En 5.9 días se consume azúcar o miel, jarabe de maíz, mermelada, cajeta, polvo para preparar bebidas; en 5.1 días, alimentos a base de frijoles, lentejas, habas, garbanzos, soya, frutos secos; 4.8 días, otros alimentos como condimentos, café, té; 4.7 días, queso, yogurt, leche u otros productos lácteos; 4 días, frutas (frescas, enlatadas, deshidratadas, en postres o ensaladas); 3.9 días, verduras (frescas, en guisados, sopas, salsas, enlatadas o deshidratadas); y en 2.9 días, huevos (de gallina, codorniz, pato u otras aves).
Finalmente cada semana en los hogares michoacanos en 2.4 días, se come carne de vaca, cerdo, cordero, cabra, conejo, pollo, pato u otras aves; en 1.8 días, papas, camote, u otro alimento proveniente de raíces o tubérculo; y en 0.7 días, pescado, sardinas, atún, camarón o cualquier otro marisco fresco o seco.
