Geólogos estadounidenses han revelado que el fenómeno de la ‘nieve oscura’ o albedo, que reduce la capacidad del hielo de reflejar la luz solar, aceleró el deshielo de los glaciares en un 20 por ciento en un solo mes.
Los científicos alertan que la ‘nieve oscura’ se extiende desde el Himalaya hasta el Ártico por el aumento de las cantidades de polvo que provienen del suelo desnudo, el hollín de los incendios y las partículas ultrafinas de carbono negro y de diesel de los motores industriales que se depositan a veces a miles de kilómetros de distancia del lugar de su liberación.
Según un estudio publicado en la revista ‘Nature Geoscience’, el fenómeno del albedo (el porcentaje de radiación que cualquier superficie refleja respecto a la radiación que incide sobre la misma) causa una atenuación significativa de la luminosidad de la nieve y las capas de hielo del mundo, que absorbe más calor solar acelerando así el deshielo.
Un equipo de meteorólogos del Gobierno francés por su parte ha informado de que la capa de hielo del Ártico, que se cree que ha perdido un promedio de 12.900 millones de toneladas de hielo entre los años 1992 y 2010 debido al calentamiento global, puede perder un extra de 27.000 millones de toneladas al año solo por el polvo, lo que podría aumentar el nivel del mar en varios centímetros para el año 2100.
Las mediciones satelitales, según los autores, muestran que en los últimos 10 años la superficie del manto de hielo de Groenlandia se ha oscurecido considerablemente durante la temporada de deshielo, que ahora en algunas zonas dura entre seis y once días más que hace 40 años.
Los científicos sugieren que el retroceso de los glaciares, por su parte, descubre mayores áreas de suelo desnudo, lo que aumenta la erosión, convirtiendo el proceso de deshielo en un círculo vicioso.