César Vázquez / @LetraMia
Morelia, Michoacán.- Médicos del Hospital Regional número 1, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de la delegación Michoacán, se aprovechan de las incapacidades institucionales para timar a sus pacientes y hostigarlos hasta que acepten operarse de manera particular en clínicas de los propios médicos.
Así lo denunció el señor Severo Velazco Sandoval, quien este jueves interpuso una queja en la delegación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y ante el Consejo Médico del propio hospital, donde expone que ha sido víctima de los intereses de los doctores quienes lo han enviado en al menos tres ocasiones a quirófano pero nunca lo operan.
Según el afectado, lleva ya un año con una bolsa para catéter por una complicación renal, ésta debió retirarse desde enero pasado, pero el médico que lo atendió, Marco Aurelio Guerrero García Rojas, con matrícula 8216487 y cedula profesional número 1361106, le explicó que no lo pasaba a quirófanos porque seguramente siempre estarían ocupados.
Sin embargo, según la queja y la declaración del mismo paciente, el médico se ofreció a operarlo en una clínica particular por un costo de 20 mil pesos. Severo Velazco no aceptó y le indicó que esperaría un turno para que la cirugía se realizara en el Hospital Regional Número 1, del municipio de Charo.
Sin embargo, el médico le programó una nueva cita de revisión con un plazo de dos meses, pese a que ya podría retirarse el catéter. Llegada la nueva fecha la actitud del médico no cambió, le volvió a dar otra cita en otros dos meses.
Finalmente el médico salió de vacaciones y en su lugar a Severo Velazco lo atendió el doctor Alejandro García Oseguera, con número de matrícula 99178942, quien luego de checar la situación lo programó para cirugía a realizarse el día 3 de Diciembre del 2014.
“Llegado el día, tal y como se me había indicado, pero después de una estancia de siete horas y media en la sala preoperatoria, cuál va siendo mi sorpresa, que sin mayor explicación me cancelan la cirugía, no me dieron explicaciones, simplemente me dijeron que tenía que abandonar el sitio y regresar otro día”, expuso don Severo.
El derechohabiente, señaló que ni siquiera le dieron indicaciones de lo que había pasado o qué debía hacer; por lo que otro día acudió con el doctor Javier Navarrete, Jefe de Cirugía del Hospital con matricula 10870415, a cuestionarlo sobre la situación.
“Fuimos a hablar con el doctor García, al cual se le pregunto el motivo de la cancelación, a lo que respondió: es que tuve otras cirugías y ya no alcance”.
Pidiendo una disculpa, le dieron una nueva cita para cirugía, se programó para el pasado lunes 8 de Diciembre del 2014.
Este día, nuevamente en la sala preoperatoria, le hacen un cambio de ropa por una bata hospitalaria, le colocan vendas necesarias para la cirugía programada a las 13:30 horas. Transcurrió el tiempo, y a las 19:00 horas se presentó una enfermera diciéndole simplemente que tenía que desalojar la estancia porque tenían que cerrar el hospital.
“Ante esta situación tan critica que prevalece en el IMSS, vine a denunciar que se están violentando mis derechos humanos y laborales; en ese hospital tratan a los pacientes como cualquier objeto, se mofan de nuestro tiempo y nuestra persona, porque en todo esto se involucra también a la familia”, explicó don Severo.
Por ello, denunció que hay una mafia interna que sólo quiere abusar de los pacientes, se programan cirugías pero a mucha gente la sacan de los quirófanos y simplemente no las operan, pues aseguró que el suyo no es el único caso del que los médicos pretenden sacar provecho al incitar a los pacientes a acudir a sus clínicas privadas.