Revolución 3.0

Las principales fuentes de abastecimiento de agua de Morelia sufren los efectos de la deforestación,el “huachicoleo” del agua y el cambio climático.

Pozos profundos, la presa de Cointzio y el manantial de la Mintzita se encuentran en punto crítico de cara al inicio de la temporada de estiaje.

Información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a través del Monitor de Presas, confirmó que solo la presa de Cointzio se encuentra a un 43 % de su capacacidad.

Al respecto, Octavio Muñoz Torres, director Técnico de Distribución de la Conagua confirmó que existe un déficit importante en la presa, lo cual la ubica entre las más agobiadas por los efectos de la sequía.

En términos concretos, Cointzio tendría que estar por encima del 65% de su capacidad, según datos de la media histórica de inicio de estiaje.

Se espera que a partir del mes de abril y mayo comience el periodo de mayor extracción de agua de la presa que abastece a casi el 40 % del recurso que consumen los morelianos.

El manantial de la Mintzita por su parte, es uno de los cuerpos de agua más estresados por el cambio ilegal de uso de suelo, la invasión, incendios provocados y el “huachicoleo” de agua más evidentes.

El manantial redujo hasta en un 50 % su capacidad de producción de agua , según datos de ambientalistas y la Comunidad Ecológica Jardines de la Mintzita.

El doctor Arturo Chacón Torres, catedrático del Instituto de los Recursos Naturales de la Universidad Michoacana ha señalado la constante degradación del espejo de agua.

En 2010, la capacidad de producción de agua del manantial era de 900 litros por segundo; para el 2021 apenas se contabilizaron 400 litros por segundo.

La mayor parte del líquido que produce el manantial es extraído para la industria papelera y el restante, para el uso urbano de las colonias del poniente de Morelia.

En una visita al lugar, se ueden constatan el ir y venir de las pipas que extren el agua, hacen fila y el ruido en la zona de las bombas de extransión es contaste.

Más de 100 piperos siguen extrayendo el recurso sin permiso a pesar de que la Procuraduría Ambiental de Michoacán y la FGR iniciaron más de 50 carpetas de investigación por el delito de despojo de agua en contra de los camioneros.

Pozos de agua, riesgo geológico

Los pozos profundos son otro de los puntos críticos en cuanto al abastecimiento de agua en la mancha urbana.

Según la sub dirección de distribución del OOAPAS, Más del 50 por ciento de los 115 pozos de agua que abastecen a la capital michoacana han reducido alarmantemente sus niveles de producción. Lo anterior, representa cortes para decenas de colonias.

La extracción de agua del acuífero subterráneo también ha traído consecuencias consigo en torno al comportamiento geológico de la zona urbana de Morelia.

El estudio Urban growth and land subsidence: Multi-decadal investigation using human settlement data and satellite InSAR in Morelia, publicado por Francesca Cigna y Deodato Tapete de la National Research Council (CNR), Institute of Atmospheric Sciences and Climate de Italia Roma, revelaron que la extracción de agua aceleró el hundimiento de Morelia.

Al igual que en la Ciudad de México, Morelia se hunde a razón de casi 9 centímetros por década.

Lo anterior, contrasta con el incremento y la expansión de las fallas geológicas en al menos 15 puntos de la capital.

La respuesta de los ayuntamientos ante la crisis hídrica se ha inclinado a perforar cada vez más profundo para conseguir el recurso. En el año 2000 la profundidad promedio de los pozos apenas alcanzaba los 100 metros. Para el 2022 se tuvieron que perforar hasta 400 metros, lo que implica un mayor gasto de electricidad y de energía para extraer el agua.

Cabe destacar que se estima que una persona promedio requiere de 200 litros de agua al día, para realizar sus actividades cotidianas, de aseo y alimentación.

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Ambiente

Morelia se seca; se extrae agua sin control

Por: Arturo Molina