Morelia, Michoacán.- De acuerdo a la asociación civil CONVIHVE, encargada de brindar orientación y apoyo a personas con el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), recientemente dos pacientes positivos fallecieron debido a que suspendieron el tratamiento ante la racionalización que realiza el sector salud por el desabasto de los tratamientos.
Organizaciones en defensa de los derechos de la comunidad LGBTTTI (Lésbico, gay, bisexual, transexual, travesti, transgénero e intersexual), denunciaron recientemente que debido a la cancelación de la compra de tratamientos para portadores del virus, en Michoacán hay cerca de 2 mil pacientes que se encuentran en riesgo por la próxima suspensión de los medicamentos.
A inicios de 2019, la Secretaría de Salud federal debió realizar la compra –a través de una licitación- de los tratamientos para pacientes VIH positivos, como se hace anualmente, sin embargo, el gobierno federal determinó realizar una nueva licitación y compra de tratamientos más económicos, mismas que hasta mayo de 2019, no han sido concretadas.
Por ello, desde 2018 se dejó de surtir a los Centros Ambulatorios para la Prevención y Atención en sida e Infecciones de Transmisión Sexual (Capasits) las medicinas que administran a los portadores, y los tratamientos que ya se encontraban en dichos centros, comenzaron a racionalizarse.
Juan Bosco Valle Delgado, presidente de CONVIHVE, explicó que desde octubre (2018) el Capasit, -que atiende a la mayoría de los pacientes- cambió su forma de entregar los medicamentos; anteriormente a un paciente estable se le daba en cada cita, tratamiento para tres o cuatro meses, “entonces para un paciente foráneo era muy práctico venir solamente tres veces al año, pero a partir de octubre les dicen que tienen que venir cada mes por el medicamento porque no hay suficiente para darles para cuatro meses”.
Este cambio en la racionalización de los medicamentos contra el VIH, ha orillado a algunos pacientes de escasos recursos que viven en las zonas más alejadas a la capital del estado, a no acudir a sus citas y por ende, no recibir el tratamiento mensual, lo cual ya cobró al menos dos vidas de personas que eran asistidas por CONVIHVE A. C.
“Hubo pacientes que dejaron de venir porque no tenían dinero para tomar su camión y venir desde Coahuayana, Lázaro Cárdenas, desde Aquila hasta Morelia únicamente para recoger su tratamiento; se les hace muy difícil pagar mil o mil 500 pesos cada mes nada más para venir por su medicamento.
Tuvimos un caso hace un mes de un muchacho que murió porque en octubre abandonó el tratamiento, en enero le dio neumonía y ya no hubo nada qué hacer. Antier me dieron la noticia de un muchacho de Uruapan que abandonó su tratamiento en septiembre, ya tenía problemas (de salud) pero se agravó con esta situación de que ya no venía cada mes por su tratamiento y murió”, narró el presidente de CONVIHVE.
Juan Bosco Valle lamentó que la dificultad económica de algunos portadores, repercuta en el daño a su salud ante el desabasto de tratamientos: “nos preocupa que esta situación vaya aumentando mes con mes, las reservas de medicamentos son nada más para mayo, entonces no sabemos si para junio vaya a haber medicamentos para todos”, dijo.
La escasez de tratamientos –que llegan a tener un costo de 14 a 16 mil pesos- ha generado preocupación en los pacientes que se atienden en Capasit, pues la suspensión de la medicación antirretroviral afectaría considerablemente la salud de los pacientes desde el tercer mes.
Otros usuarios del Capasit que se encuentra en Morelia, señalan que dicho centro ya no realiza exámenes rutinarios, por lo que ahora se les pide a los pacientes que acudan a laboratorios privados, los cuales llegan a costar hasta 4 mil pesos.
En riesgo, mil 935 pacientes con VIH por próximo desabasto de tratamientos
