Sarahí Díaz/ @Michoacan3_0
Morelia, Michoacán.-Como si fuera un animal peligroso, Nestora Salgado García se encuentra aislada de los demás, en un penal de alta seguridad de Tepic, Nayarit. No habla con nadie, no toma el sol, no recibe revistas, ni periódicos, no ve televisión, tampoco ha recibido una carta de su esposo o un dibujo de sus nietos. Dos veces a la semana habla con su hija Zafra, pero sólo son dos minutos.
-¿Quién es Nestora Salgado?
Nestora es originaria de Olinalá, Guerrero, al igual que muchas otras madres emigró a los Estados Unidos a fin de encontrar mejores oportunidades de empleo y sacar adelante a sus tres hijas, algo que en la montaña no abunda. Años más tarde se convertiría en ciudadana estadounidense; en 2004 regresó a Olinalá a vivir permanentemente.
En 2011, luego de que la inseguridad se saliera de control en Olinalá y aumentaran las extorsiones, los secuestros, los robos a casa habitación y asaltos a mano armada, Nestora, mejor conocida como “La comandata” se unió a la Policía Comunitaria.
En mayo de 2013 fue nombrada coordinadora del movimiento. A sólo un año de lucha, los crímenes de alto impacto en Olinalá se redujeron en un 90 por ciento. “Tal vez fue por eso que el gobierno de Aguirre terminó por agredirnos, a mí y a otros doce comunitarios.
Detenida y acusada del secuestro de 47 personas
El 21 de agosto de 2013, Nestora fue capturada en medio de un impresionante despliegue militar y policial “de esos que no se los dedica el gobierno ni a los peores narcos”.
Fue acusada del delito de secuestro (al parecer de 47 personas), dentro de la causa penal 142/2013-II que se instruye en el Juzgado Segundo de Primera Instancia del Ramo Penal del Distrito Judicial de Los Bravo, con sede en Chilpancingo, Guerrero
Sin ninguna justificación y tras violaciones a sus derechos, “La Comandanta” fue trasladada al Centro Federal de Readaptación Social de Tepic, dónde permanece encerrada injustamente.
El Centro de Derechos Humanos de la Montaña (CDHM), Tlachinollan defiende y ha exigido su liberación por la ilegalidad de su detención y el traslado a una cárcel de máxima seguridad. Su esposo Luis, quien radica en Estados Unidos también ha emprendido una lucha por su liberación en aquel país.
El mensaje a las mujeres
“Sé que quieren quebrarme pero no lo lograrán. Sé que con mi encierro quieren que yo escarmiente y todos y todas las demás que en México se levanten contra tanta injusticia”.
“No me quebrarán. Nunca saldrá de mi boca que pido perdón. No tengo porqué pedirle perdón a nadie y menos al gobierno. De mi boca y de mi corazón sólo escucharán que salen palabras de aliento para todos aquellos y aquellas que, como yo, se deciden por hacer algo por sus pueblos y sus hijos”.
Así dicta una carta que fue entregada y posteriormente divulgada por su hermana, a quién solo ve dos veces por semana. A través del escrito, Nestora Salgado se dirige con un mensaje a todas las madres, las esposas, las hermanas y las hijas de los comunitarios encerrados como ella, a las mujeres en general.
“Les pide que no se dejen de nada ni de nadie, que no toleren al gobernante corrupto y amafiado, que no acepten la discriminación en ningún lado, ni el maltrato. A las mujeres de Olinalá, les pido que sigan la lucha que hace más de un año iniciamos junto con nuestros esposos y vecinos”. Expresó.
Nestora Salgado García tiene 42 años, tres hijas, cuatro nietos y una nieta; tras casi siete meses de encierro, las autoridades en complacencia de la Federación siguen agregando más motivos a su detención y han surgido varios “testigos” que supuestamente fueron víctimas de secuestro por parte de Nestora.
“Saldré de prisión y lo haré con la frente en alto, porque las personas honradas saben que soy una presa política. Saldré de prisión a continuar con la lucha que desde la Policía Comunitaria inicié”, concluyó “La Comandante”.