César Vázquez / @LetraMia
Morelia, Michoacán.-Se les agotó el tiempo a los diputados michoacanos para reformar el Código Familiar donde se permitan las bodas entre personas del mismo sexo, por lo que al no haberse sesionado incurren en un desacato a una orden judicial que emitió la juez Séptimo de Distrito. El tiempo límite era hasta el último minuto de este 15 de julio.
Por lo anterior, los legisladores podrían ser aprehendidos, recibirían sanciones económicas de 100 salarios mínimos, y el presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado sería destituido.
Así lo explicó la diputada independiente, Talía Vázquez Alatorre, quien refirió que este día se debió subir a la orden del día la iniciativa con proyecto de decreto para modificar el código actual, pero debido a que se suspendió la sesión también se acabó el tiempo para acatar una orden judicial.
“Es nuestra obligación cumplir con un mandato judicial, ya no se trata de si queremos o estamos a favor o en contra de las bodas entre personas del mismo sexo; esta es una orden judicial”, expuso la diputada.
Esta situación se deriva de un mandato emitido el pasado 22 de junio, cuando la Suprema Corte de Justicia estableció que todos los códigos familiares y civiles de toda la República que no permitan las bodas igualitarias son inconstitucionales.
En este tiempo los diputados pudieron aún discutir cuándo podrían aprobar estas modificaciones, “pero el viernes pasado nos notificaron de una resolución que causó ejecutoria y el plazo se vence hoy; ya está en un proceso de ejecución, ya no se trata de alegar nada, simplemente obedecer”, refirió Talía Vázquez.
Refirió que por estas circunstancias, los diputados elaboraron la iniciativa con carácter de decreto que debió aprobarse a más tardar este miércoles, pero sólo lo firmaron 13 diputados, el resto ya no pudo acudir hasta el Palacio Legislativo.
“Pero nosotros estamos dejando la constancia de nuestra iniciativa, porque es un delito federal no cumplir con una ejecutoria de amparo, a la hora que vengan las órdenes de aprehensión, nosotros vamos a poder alegar que estos diputados hicimos lo posible por cumplir en tiempo y forma para que se hubieran reformado esos artículos en esta sesión”, fijó Talía Vázquez.
Por no haber cumplido con este mandato judicial, según lo explicó la misma diputada, ahora se iniciará un proceso de ejecución del amparo, que contempla aprehensiones, multas de 100 días de salario mínimo y la destitución del presidente de la Mesa Directiva del Congreso.
Por separado el diputado Sarbelio Molina Veléz minimizó que dicha orden judicial pueda tener estas consecuencias, en entrevistas radiofónicas anunció que ya se le ordenó al Departamento Jurídico del Congreso que conteste a la orden de la jueza, lo que dejaría sin efectos dicho mandato.
Al respecto la diputada Talía Vázquez señaló que ese no es el proceso jurídico, que los mandatos judiciales son para cumplirse y punto.
“Pero supongamos que la jueza dé cumplimentada la orden y acepte la contestación que le emita el Departamento Jurídico, pero hay otras instancias a las que las afectadas pueden recurrir, y esto no se gana de ninguna manera, tarde o temprano la Suprema Corte nos va a obligar a cumplir”, fijó.
Pero atajó que el Artículo 193 de la Ley de Amparo los obliga a cumplir aunque ya no estén en el cargo, y considerando que el litigio se puede extender por muchos días e incluso meses, la corte estaría en condiciones de emitir una sentencia más tardar en los primeros días del próximo año.
“No importa que nosotros ya no estemos en turno, a los diputados que estén al frente los obligarán a cumplir, pero a los diputados que no cumplimos nos buscarán para consignarnos, por eso es importante para nosotros dejar constancia de qué diputados sí estábamos en la ruta de cumplir”, fijó.
El mejor de los escenarios, refirió, es que en la próxima sesión del Congreso, que se prevé se pueda realizar en agosto, se apruebe este mandato y finalmente se modifiquen los artículos necesarios del Código Familiar para que se permitan las bodas igualitarias, ya no importa ni la postura de la Iglesia ni otras creencias personales.
