Radio Ocumicho: entre el acecho delincuencial y el rescate cultural

Morelia, Michoacán.- Son las 6:00 de la mañana y Esteban Cruz Rosas, enciende una computadora, tres pantallas, una consola y un micrófono. Primero suenan las pirekuas y el locutor saluda a su audiencia en purépecha que minutos después, traduce al español; así, la magia de la radio surge en un pequeño y austero cuarto improvisado como cabina, donde el comunicador indígena colabora desde la década de los 90.

Durante las tres horas siguientes, Esteban transmite noticias, entrevistas, opiniones y charlas con funcionarios, activistas o líderes sociales. Así es el día a día del periodista que, junto a su esposa, dirigen la Radio Comunitaria de Ocumicho, una población autónoma del municipio indígena de Charapan.

La existencia de la radio comunitaria en esta localidad ha sido una historia de lucha y resistencia. Como fundador de la estación, Esteban se ha enfrentado a la falta de apoyo gubernamental para la adquisición de equipo, el desistimiento de los colaboradores que junto a él iniciaron el proyecto, pero lo más preocupante quizás, es hacer frente al acecho delincuencial.

El comunicador, que además es coordinador del Concejo Comunal de Ocumicho, recuerda que la radio fue pieza clave en la organización de la comunidad para la conformación de su autogobierno y su ronda comunitaria, conocida como “Kuáricha”.

La radio funcionó como un canal para expresar el descontento comunal y exigir seguridad ante la tala clandestina y el ecocidio de sus bosques, aunque alzar la voz a través de las emisiones cobró la vida del secretario de Bienes Comunales, Prudencio Ortíz Quiroz, en el año 2020.

“En aquel tiempo llevábamos como 200 hectáreas (taladas), empezamos a reclamar a las autoridades que no veían que el cerro se estaba quedando totalmente pelón. Comenzamos a tratar el tema de la tala y tuvo una repercusión, mataron a una autoridad”, recuerda Cruz Rosas.

Y es que en Ocumicho, no puede hablarse de la tala ilegal para la siembra de aguacate, sin asociarla con la delincuencia, reconoce Esteban. Ambos temas, son tocados con sutileza para evitar repercusiones lamentables.

El locutor admite que por su labor al frente de la radio comunitaria, ha sufrido represalias, y aunque evita dar detalles de lo ocurrido, para los michoacanos no fue un secreto la desaparición de Esteban en abril de 2022, a manos de un grupo armado.

“Tuve un riesgo muy fuerte y si no fuera por el Consejo Supremo Indígena no estaría ahora platicándote. Es preocupante trabajar en este ambiente, pero es una labor que lo traes en la sangre, lo haces con mucha precaución y sobresaltos, porque no les gusta (a ciertos grupos) que se aborden esos temas, son tabú.
Puedo hablar, pero son temas delicados, y al hablar estás expuesto a la causa y efecto, y no nada más eres tú, es tu familia y la gente que vive a tu alrededor”, lamenta.

Para muchos de los 3 mil 800 habitantes de esta comunidad, la radio es el único medio por el que se mantienen informados de lo que ocurre en la región y el estado. Aunque existen otras tecnologías, la brecha digital y el idioma son limitantes. En su vivienda, María Cruz Paz Zamora, toma el aparato de radio para sintonizar la señal del 97.3 FM y escuchar las noticias.

“La mayoría de la gente mayor escucha la radio. Yo escucho lo que está pasando por México, en otras ciudades. A veces no salimos de la comunidad pero sabemos cuando tienen cerrada alguna carretera, o accidentes, cuando se pelean la gente mala ya sabemos por dónde no pasar”, comparte la joven.

Además de informar a la comunidad, la Radio Comunitaria de Ocumicho realiza otra importante labor: mantener viva la lengua purépecha, su tradición y sus saberes, pues la programación cultural incluye música purépecha, anuncios sobre festividades y recetas de medicina tradicional.