“Queridos compañeros, cuiden al país, cuiden a la Revolución”, así se despidió de sus simpatizantes el expresidente de Ecuador, Rafael Correa, antes de partir a Bélgica, donde radicará con su familia, tras gobernar durante diez años (2007-2017).
El exmandatario se dirigió a los ecuatorianos desde una tarima improvisada en las afueras de la sala protocolar del aeropuerto internacional de Quito. “Me voy feliz, pero la alegría o la tristeza coyuntural no altera esa condición del alma, que da la paz con uno mismo. Yo estoy feliz, estoy bien, no se preocupen por mí, preocúpense por el país. A defender lo ganado, a defender la Revolución”, expresó.
Correa aseguró que su viaje a Bélgica es para devolverle a su familia los sacrificios de diez años al frente del Gobierno ecuatoriano. “Tengo sentimientos encontrados: el dolor de dejar a mi patria, a la que adoro; el dolor de dejarlos a ustedes, pero también la alegría de poder ya finalmente con mi familia, de poder darle un poco de tranquilidad, después de diez años en lo personal muy felices, pero sin duda, muy duros, y duros para la familia”, dijo.
Indicó que pese a que el 2 de abril derrotaron a la oposición en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales “no estoy muy seguro si venció la Revolución Ciudadana, compañeros”.
Hizo un llamado al movimiento Alianza PAIS a denunciar “pactos inaceptables con el bucaramato” o la entrega de empresas públicas. Esto en referencia al diálogo iniciado entre el actual mandatario Lenín Moreno con sectores de la oposición.
“Sí Alianza PAIS no habla claro en estas coyunturas, no denuncia pactos inaceptables con el Bucaramato, la entrega de empresas públicas, mejor que deje de existir Alianza PAIS, porque nacimos para luchar contra eso (de) las componendas, la entrega, el reparto de la patria como botín entre piratas”, aseveró.
Correa advirtió que de lo contrario sino será el primero den desafiliarse de Alianza PAIS “porque yo no nací para eso”.
Moreno, exvicepresidente del Gobierno de Correa, se reunió con el opositor Dalo Bucaram, hijo del destituido expresidente Abdalá Bucaram, en el marco de un diálogo nacional para crear una comisión anticorrupción que ya existía en la Revolución Ciudadana.